Golfista argentino Ángel Cabrera sentenciado a dos años de cárcel por violencia de género
‘Pato’ Cabrera de 51 años fue condenado a dos años de prisión efectiva por lesiones leves, lesiones leves calificadas, hurto y amenazas contra su expareja
Los hechos por los que fue condenado Ángel Cabrera ocurrieron en 2016. Crédito: Getty Images
El golfista argentino Ángel ‘Pato’ Cabrera, campeón del Abierto de los Estados Unidos de 2007 y del Masters de Augusta en 2009, fue condenado este miércoles a dos años de prisión efectiva por haber ejercido violencia de género hacia su expareja, según la resolución judicial publicada por medios locales.
El golfista de 51 años ya tenía prisión preventiva desde enero porque había estado sin autorización de la Justicia tanto en Estados Unidos como en Brasil, donde fue apresado y extraditado.
🚨Angel Cabrera has been sentenced to two years in prison … 😳 pic.twitter.com/EDAxjTLSor
— NUCLR GOLF (@NUCLRGOLF) July 8, 2021
Los hechos por los que fue condenado Cabrera ocurrieron en 2016 y quedaron registrado parcialmente en vídeos que la víctima grabó con su celular.
Durante el juicio se ventiló cómo la separación de sus padres cuando era muy joven terminó afectando la conducta de Cabrera; además de las dificultades emocionales que vivió con su abuela, y cómo el deporte lo cambió de cierta manera.
Hoy, Ángel Cabrera fue condenado a 2 años de prisión efectiva, por violencia de género. Si bien la defensa comentó que en 2 meses estaría libre (apelará la decisión. Ya lleva 6 meses de prisión), deberá realizar terapia psicológica y superar su adicción al alcohol. pic.twitter.com/3ceJWtw046
— HANDICAP 54 (@handicap_54) July 8, 2021
Cabrera fue condenado por lesiones leves, lesiones leves calificadas, hurto y amenazas en contexto de violencia de género y según la resolución judicial el golfista atacó a su expareja en más de una ocasión.
El campeón del Masters de Augusta de 2009 también fue denunciado por otras parejas que tuvo.
Cabrera fue el segundo latinoamericano en ganar un torneo “major” después del también argentino Roberto De Vicenzo.
Con información de EFE
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