‘Yo ya me veo regresando con bolsas de tiendas de allá’
Comerciantes fronterizos se preparan para la reapertura de la frontera; 95% de los consumidores en San Ysidro son mexicanos
“Estamos sacando a los estantes todo lo que teníamos en bodega, todo”, explicó a La Opinión la joven Irene Martínez, empleada de una tienda de ropa en San Ysidro, en la frontera de California con México.
“Queremos tener todo a la vista de los clientes, porque sabemos que ahora que por fin puedan cruzar las personas con visa desde México, van a venir mucho en busca de ofertas a San Ysidro”, comentó.
“Ha pasado tanto tiempo que no pueden venir a comprar, que anticipamos que desde el mismo 8 de noviembre, cuando se reabra la frontera, vamos a estar muy ocupados todo el día”, reflexionó.
Han sido 19 meses desde que primero el gobierno de Donald Trump y luego la administración del presidente Joe Biden, mantuvieron restricciones a los cruces fronterizos no esenciales, como medida para prevenir contagios, en el marco de la pandemia de covid 19.
El cierre básicamente en exclusiva a mexicanos con visa que cruzan la frontera ocasionó hasta septiembre pasado “perdidas en ventas por 1,300 millones de dólares”, dijo a La Opinión el director ejecutivo de la Cámara de Comercio de San Ysidro, Jason Wells.
En Sam Ysidro más del 95 por ciento de los consumidores son mexicanos residentes de la frontera que cruzaban desde Baja California por lo menos una vez a la semana a abastecerse desde alimentos básicos, ropa y utensilios, hasta gasolina y artículos de limpieza.
Durante las restricciones fronterizas, desde marzo del año pasado, uno de cada cinco negocios en San Ysidro cerró sus puertas definitivamente.
“Lo más lamentable es que 2,200 empleados de esos negocios que cerraron perdieron su trabajo; son más de 2,000 familias para las que ya fue imposible contar con su sustento”, dijo Wells.
Jonathan, un joven de Tijuana, que regularmente cruzaba a San Ysidro, dijo que “desde marzo del año pasado, cada mes nos decían que las restricciones iban a continuar hasta el día 21 del siguiente mes, y llegaba ese día y decían que hasta el siguiente 21. Esto ya parecía una broma”.
Jonathan, quien ya ahorró para cruzar en cuanto reabran a comprar tenis y ropa deportiva, recordó que los residentes de Tijuana ya hacían memes con el tema.
“Recuerdo uno que decía ‘a solo falta un mes para que falte un mes para que nos digan que la frontera se reabre al mes siguiente’”, bromeó.
Las restricciones solo se impusieron a quienes con visa cruzan de México a Estados Unidos por tierra; no fueron para las personas que volaron a ciudades estadounidenses, ni para residentes legales o ciudadanos estadunidenses.
Tampoco se impusieron para nadie en sentido de Estados Unidos a México.
Ahora que la administración Biden anunció que a partir del lunes 8 de noviembre el paso estará abierto a todos los extranjeros que demuestren que se han vacunado, la reapertura “no pudo llegar en mejor momento”, dijo el director ejecutivo de los comerciantes en San Ysidro.
“El 75 por ciento de las ventas de los comercios de San Ysidro se registran entre el 20 de noviembre y el 6 de enero”, dijo Wells.
San Ysidro es el punto fronterizo más transitado en el mundo, de acuerdo con definición oficial del Departamento de Comercio.
Desde la segunda semana de noviembre decenas de miles de personas querrán cruzar por la garita de San Ysidro para hacer compras.
Ahora solo queda la duda de si los mexicanos vacunados con dosis que desconoce la Administración de Alimentos y Medicamentos (USFDA) podrán cruzar a Estados Unidos con su registro de vacunas y su visa.
Cientos de miles de mexicanos fueron vacunados con dos dosis que no han reconocido ni la USFDA ni la Organización Mundial de la Salud (OMS), las vacunas CanSino de China y la Sputnik 5 de Rusia.
La oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) que tendrá a su cargo la revisión de esos requisitos a quienes crucen la frontera no respondió a solicitudes de la prensa para aclarar.
La señora Graciela García en Tijuana dijo que ella tiene visa vigente y fue vacunada con CanSino. “me pusieron las dos dosis juntas, el mismo día, y hasta ahora nadie me sabe decir si me van a dejar cruzar o no”.
García dijo que “es que no me dicen si sí o no, no me responden ni en México ni en Estados Unidos”.
Supone que “tendré que averiguar hasta el mismo día en que vaya a cruzar, a ver si me dejan, pero como veo que les interesan las ventas a los mexicanos, espero que lo más seguro sea que sí; yo ya me veo regresando con bolsas de tiendas de allá (de San Diego) a mi casa”.