Defensores de migrantes urgieron acciones del Gobierno de Biden
Los activistas defensores de los inmigrantes piden a Biden tomar acciones con respecto a este caso, ya que el año pasado hubo fracasos debido a que varias propuestas murieron en el Congreso
Activistas pro inmigrantes le exigen a Biden tomar acciones Crédito: RINGO CHIU | AFP / Getty Images
Grupos defensores de los migrantes urgieron al Gobierno del Ejecutivo, Joe Biden, lo que prometió sobre reformar el sistema de inmigración, luego de un año de estancamiento y más aún cuando los demócratas corren el riesgo de perder la mayoría en el Congreso.
Aunque reconocieron que se ha avanzado de a poco para eliminar algunas medidas establecidas por el expresidente Donald Trump, su mayor preocupación se centra en que no se han hecho grandes cambios al respecto.
“A un año de su Administración le hacemos un llamado para que recuerde sus promesas y las haga realidad”, enfatizó Angélica Salas, directora de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA).
La solicitud realizada por la campaña “We are home”, en la que participan decenas de grupos en pro de los inmigrantes por todo Estados Unidos, tienen presente dos grandes objetivos: abrir un camino a la ciudadanía a millones de inmigrantes y construir un sistema de inmigración “justo y humano“.
Reforma migratoria que no llega
La urgencia que otra vez están inyectando los activistas para que la administración de Biden impulse una residencia permanente para los indocumentados se encuentra marcada por los fracasos del año 2021, debido a que varias propuestas fueron consideradas la gran mayoría quedó solo en papel.
Las esperanzas están en el plan social de Biden quien lo llamó “Build Back Better”, que incluye un proyecto para proteger a inmigrantes, pero no se logró aprobar el año pasado por la negativa del senador demócrata, Joe Manchin.
Cambios justos y humanos
En la lista de peticiones que requieren mayor atención los activistas incluyen terminar de una vez por todas con normas y regulaciones que atentan contra las peticiones de asilo y el debido proceso.
Los activistas exigen poner fin al Título 42, norma que permite la expulsión de extranjeros que cruzan las fronteras debido a la emergencia sanitaria del coronavirus.
Además del rechazo a la reanudación del programa de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, o Quédate en México), creado por Trump en 2019 y por el cual los migrantes que llegan a la frontera sur solicitando asilo deben permanecer en México mientras completen sus trámites en Estados Unidos.
El Estado se vio obligado a restaurar la norma tras una demanda de dos estados republicanos. Una disputa legal que está en el Tribunal Supremo.
Republicanos, ¿piedra de tranca?
En este sentido, los republicanos están siendo blanco de críticas. El representante de America’s Voice, Douglas Rivlin, destacó en un comunicado que “el Partido Republicano no puede ser a la vez antiimigrantes y favorecer el crecimiento económico”, resaltando el bloqueo de los conservadores a las reformas para legalizar a los trabajadores esenciales indocumentados.
“El presidente Biden y los demócratas deben usar todas las herramientas a su disposición para ayudar al país y a nuestra economía mediante la legalización de la inmigración, tanto para los inmigrantes que ya están aquí como para los que vendrán para ayudar a nuestra economía en el futuro”, añadió.
Momento de ser coherente
Por su parte, la directora de Detention Watch Network, Silky Shah, pidió a la Casa Blanca ser coherente con sus promesas sobre no criminalizar a los indocumentados, y aminorar las detenciones y deportación de inmigrantes.
Asimismo, la activista se refirió a la solicitud realizada por el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, a los alcaldes de las ciudades que limitan la cooperación de sus cuerpos policiales con el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para que replanteen la colaboración en lo que respecta a la retención de extranjeros.
El secretario respaldó su petición diciendo que ICE “no es la misma agencia del pasado”, al referirse al rumbo que había tomado la agencia en la Administración pasada.
“Hay muy pocas evidencias de que esto sea cierto, de que la posición del ICE haya cambiado. Aún no hemos visto cambios en las políticas de deportación y encarcelamiento”, enfatizó Shah.
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