Conflicto Rusia y Ucrania: Conoce las corporaciones que han abandonado Rusia en los últimos días
Ante el conflicto entre Rusia y Ucrania, grandes corporaciones mundiales han tenido que demostrar su papel en el concepto de "responsabilidad social". A muchas les ha tocado hacer maletas y alejarse de cualquier vínculo con Rusia; y a otras su única opción es cerrar por solidaridad y seguridad a sus empleados
Ha pasado una semana y unos días desde que comenzó el conflicto armado entre Rusia y Ucrania, luego que el gobierno de Vladimir Putin decidiera invadir Ucrania con sus tropas. Desde entonces, el pasado jueves 24 de febrero, el mundo ha reaccionado y entre otros destacan todas las corporaciones o empresas que decidieron abandonar el mercado ruso. Pero, por los ataques el mercado ucraniano también ha sufrido un golpe de rebote.
Y es que desde el mundo entero, salvo algunas excepciones, todos los planes de negocio con Rusia fueron paralizados de inmediato y son cientos de conocidas marcas las que decidieron hacer un stop en su comercio con el país que invadió Ucrania hace más de una semana. Y por la guerra, en Ucrania fue obligado que muchas empresas pararan operaciones.
Para Rusia, el boicot o castigo empieza por las petroleras, que prácticamente cerraron el grifo hacia Rusia, pasando por los fabricantes de autos y los barcos y aviones que dejaron de llegar a suelo ruso o bien bloquearon el acceso desde Rusia.
Apple, BP, Ford, Mitsubishi, Microsoft, Google, FedEx, Disney, Netflix, Paypal, Adidas, FIFA, Snapchat, Sony, Visa, MasterCard, Ikea, Zara, Universal, Warner Brothers, Wolskwagen, H&M, Harley Davidson, ExxonMobil, Toyota, Mercedez-Benz, Volvo, cervezas Budvar, cervezas, Carlsberg, Boeing y Airbus, TikTok, y Lego. Son algunas de las marcas más destacadas que podemos mencionar entre las que han castigado al gobierno de Rusia por sus acciones bélicas.
En este cierre al mercado ruso, las compañías que lo hacen argumentan varias razones: primero que nada mantener “la reputación” como corporaciones que no hacen negocios con países que proclaman la guerra; por otra parte, los que han tenido que cerrar en Ucrania, alegan “la responsabilidad corporativa de proteger o brindarles seguridad a su personal”, al trabajar en un terreno en conflicto.
Por otra parte, las sanciones internacionales y las restricciones a la exportación, de alguna manera, obligan a muchas corporaciones si no es a retirarse al menos es a mantenerse al margen en ese mercado. Por lo menos momentáneamente, dicen especialistas en un trabajo recopilado por periodistas de Associated Press.
“Básicamente ninguna empresa, ninguna multinacional, quiere quedarse en el lado erróneo de las sanciones estadounidenses y occidentales”.
Mary Lovely, investigadora del Peterson Institute for International Economics.
A la par de toda esta decisión de corporaciones extranjeras que salen de Rusia, el gobierno de Putin restringió de forma temporal a empresas extranjeras vender activos rusos.
Por supuesto, todo esto tiene un costo mil millonario para todas esas corporaciones, para algunas abandonar estas inversiones implica mucho dinero. Tal es el caso de BP, cuya participación con la estatal de gas y petróleo rusa es de unos $14,000 millones de dólares.
Inversiones del mismo estilo probablemente e incluso mayor también tenían Shell, con el gasoducto Nord Stream 2 y ExxonMobil con otro proyecto de gas y petróleo con Rusia.
En el área automotriz, Toyota, Volvo, Ford, Mercedes-Benz y otros hicieron un alto, no solo suspendieron exportaciones de autos a Rusia; sino que pararon la producción de las plantas en ese país.
La Harley-Davidson, anunció también la suspensión de ventas de sus motos en Rusia, y dijo abogó por la “seguridad de la gente en Ucrania”, así que cerrará temporalmente.
Por su parte, la Renault, con un mercado grande en Rusia anunció la suspensión de actividades en su planta de Moscú, aunque habló de problemas logísticos.
Las empresas de aeronáutica Boeing y Air Bus anunciaron el cese en el suministro de piezas para aviones rusos. Boeing detuvo su planta en Moscú y por razones obvias también detuvo operaciones en Kiev.
Las cerveceras que suspendieron su producción para Rusia e incluso en Ucrania. Le apostaron a “ayudar de otras formas” porque la distribución de cervezas en este momento no era prioridad. La Cerveza Budvar, mostró interés en ayudar a los refugiados ucranianos. Mientras que, la cerveza Budvar con gran mercado en Rusia por el momento ha anunciado es el alto de su producción en Ucrania.
Para los expertos, hacer negocios en Rusia ya es complicado, continuarlos ahora implica tener que asumir un costo quizá muy alto. Por cuestiones de riesgo y de reputación.
Las minoristas de ropa o de accesorios para el hogar, también se unen a los cierres, aunque casi todas hable de “algo temporal” su argumento principal es la seguridad de sus empleados y clientes. H&M la marca sueca de ropa han anunciado el cierre de 168 tiendas. La fábrica de muebles Ikea anunció su cierre total, lo que produjo ventas nerviosas y tiendas colapsadas por los clientes. el alto de sus actividades en Rusia.
Rusia es un gran mercado para el mundo del entretenimiento, para el cine sobre todo, entra entre los primeros 12 países que logran récords de taquilla. Pero los estudios de Hollywood han suspendido sus estrenos programados en Rusia, y anunciaron “serios retrasos” debido a la crisis humanitaria que se viene.
La tecnología no se queda atrás, Apple suspendió sus ventas en Rusia; y Dell lo hizo tanto en Ucrania como en Rusia.
En este sentido, la opinión pública ha jugado un importante papel en la decisión de muchas empresas para retirar sus relaciones comerciales con Rusia, al menos temporalmente. Y para detener su actividad en Ucrania. El tema de “responsabilidad social” en los últimos tiempos se posiciona en las corporaciones, y este es un buen momento para demostrarlo.
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