Hombre de Carolina del Sur sufre de infarto mientras enterraba el cuerpo de la mujer que asesinó

El atacante de 60 años estranguló a su pareja de 65 de edad hasta matarla, luego la ató y envolvió en bolsas de basura, cuando disponía a enterrarla sufrió el ataque al corazón

Las autoridades arribaron al domicilio y encontraron los dos cadáveres.

Las autoridades arribaron al domicilio y encontraron los dos cadáveres.  Crédito: Leon Neal/ | Getty Images

La investigación de los agentes descifró que un hombre murió de un ataque al corazón cuando estaba sepultando el cuerpo de una mujer que había estrangulado hasta la matarla.

La policía del condado de Edgefield descubrió el cuerpo sin vida de un hombre que respondía al nombre de Joseph Anthony McKinnon de 60 años que se encontraba en el jardín trasero de su domicilio en Trenton.

Cuando las autoridades médicas arribaron al lugar para llevar el cadáver de McKinnon al forense, encontraron dentro de un hoyo recién excavado, otro cadáver, el de una mujer.

Patricia Ruth Dent de 65 años, también fue trasladada con el médico forense en donde realizaron la autopsia de los dos cuerpos.

El resultado del médico fue que Ruth Dent murió por estrangulamiento y Joseph Anthony McKinnon falleció de un infarto al corazón.

La evidencia recolectada en la escena, permitió a las autoridades de Edgefield reconstruir los hechos. La pareja vivían juntos, McKinnon ahorcó hasta quitarle la vida a Dent, luego la amarró y envolvió en bolsas de basura, excavó un hoyo en el jardín trasero del domicilio que compartían y cuando intentaba sepultarla, sufrió de un ataque cardiaco que le quitó la vida al momento.

“La ató y la envolvió en bolsas de basura antes de ponerla en el pozo previamente excavado. McKinnon estaba en el proceso de enterrar el cuerpo de Dent en la fosa, cuando sufrió un evento cardíaco que lo mató”, explicó el alguacil del condado de Edgefield.

Pamela Briggs, hermana de Ruth Dent dio una entrevista para un noticiero de Carolina del Sur en donde confesó que la muerte de su familiar fue un golpe muy fuerte, sobre todo por la forma en la que la asesinaron.

“Estoy conmocionado, no vi venir nada de eso. Todos, los que alguna vez la conocieron, la querían; estaba llena de energía, tenía 65 años y trabajaba”, compartió Briggs.

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