El día más vergonzoso para un presidente de Estados Unidos: George HW Bush vomitó sobre el primer ministro de Japón
El presidente Georg HW Bush protagonizó unos de los momentos más humillantes para un mandatario estadounidenses, inclusive el incidente diplomático también fue ampliamente cubierto por los medios japoneses.
El incidente del presidente George HW Bush se convirtió rápidamente en motivo de sátira y comentario de la mayoría de comediantes estadounidenses. Crédito: LUKE FRAZZA | AFP / Getty Images
Una de las “metidas de pata” más ridiculizas y memorables en la historia de la presidencia de los Estados Unidos ocurrió en Japón la tarde del 8 de enero de 1992, cuando el presidente George HW Bush vomitó sobre el primer ministro de Japón.
El primer ministro Kiichi Miyazawa estaba organizando una cena para el presidente en honor a su visita de estado. Bush, que tenía 67 años en ese momento, parecía gozar de buena salud y esa mañana jugaba tenis de dobles con el emperador de Japón y su hijo.
Durante la cena, sin embargo, Bush enfermó repentinamente. Se inclinó hacia adelante, luego cayó de lado, vomitando en el regazo de su anfitrión, el Primer Ministro.
El presidente estadounidense luego se desmayó cuando su esposa Barbara, sus ayudantes y miembros del Servicio Secreto lo asistieron rápidamente. Despertó luego de unos minutos y pudo abandonar la cena por sus propios medios, disculpándose por el incidente.
Más tarde, los médicos afirmaron que el presidente había sufrido una gastroenteritis aguda y se sentía bien después de tomar un medicamento contra las náuseas. Reanudó su horario normal la tarde siguiente.
No obstante, el incidente y el video borroso del colapso de Bush recibieron una enorme atención en Norteamérica.
Saturday Night Live falsificó el incidente, comparándolo con el asesinato de John F. Kennedy. Aunque se rehusó a sacar provecho de ello públicamente, el retador de Bush, Bill Clinton, probablemente se benefició del incidente.
La relativa juventud y vitalidad de Clinton fueron clave para su imagen pública, y la muy pública enfermedad de Bush solo sirvió para reforzar las diferencias entre los dos hombres.
Bush perdió su candidatura a la reelección en noviembre siguiente, aunque viviría para ver a su hijo, George W. Bush, cumplir dos mandatos como presidente.
Incluso hoy, la vez que Bush vomitó sobre el primer ministro japonés ocupa un lugar especial en los momentos más ridículos presidenciales estadounidenses. También entró en el léxico japonés: la frase coloquial bushuru, que se traduce aproximadamente como “tirar de un arbusto”, se convirtió en un término popular de la jerga para vomitar a raíz del incidente.
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