Alimentación saludable: qué debemos saber sobre las etiquetas de productos en Estados Unidos

Bajo estas nuevas reglas, más alimentos como nueces, semillas y ciertos aceites podrían etiquetarse como "saludables"

Alimentación saludable: qué debemos saber sobre las etiquetas de productos en Estados Unidos

El término "saludable" se basa en las recomendaciones sobre la ingesta de grasas y la cantidad de ciertas vitaminas que las personas pueden consumir. Crédito: Chaay_Tee | Shutterstock

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) planteó las nuevas reglas que dictan cuándo los productos alimenticios pueden tener la etiqueta “saludable” en sus envases como parte de un esfuerzo para promover una alimentación más saludable en los EE. UU.

El término “saludable” fue definido por última vez por la FDA en 1993 y se basó en las recomendaciones vigentes en ese momento que tenían que ver con la ingesta de grasas y la cantidad de ciertas vitaminas que las personas deberían consumir.

El anuncio de la FDA se produjo el mismo día de la Conferencia de la Casa Blanca sobre el Hambre, la Nutrición y la Salud con el objetivo de promover este mensaje sobre cómo mejorar la ingesta nutricional.

Según la FDA, las nuevas reglas cambiarían la definición de “saludable” para reflejar la “ciencia actual de la nutrición”. Bajo estas nuevas reglas, más alimentos como nueces, semillas y ciertos aceites podrían etiquetarse como “saludables”.

De adoptarse las reglas propuestas por la FDA, los alimentos etiquetados como “saludables” deberían tener cantidades “significativas” de al menos un grupo o subgrupo de alimentos recomendado por las Pautas dietéticas del gobierno federal.

Las limitaciones del etiquetaje

Estos productos también tendrían que cumplir con ciertas limitaciones de nutrientes como grasas saturadas, sodio y azúcares añadidos.

Una guía emitida por la agencia en 2016, explica que la comprensión científica de la nutrición ha evolucionado en los más de 20 años desde que se definió “saludable”.

Estos cambios incluyen la inclusión de “grasas buenas”, como las grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas, que han demostrado reducir el riesgo de ciertas enfermedades.

La FDA también señaló que la ingesta de nutrientes ha cambiado y que la deficiencia de nutrientes como las vitaminas A y C ya no es un problema de salud pública.

“La nutrición es clave para mejorar la salud de nuestra nación”, dijo el secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, en un comunicado.

“La comida sana puede reducir nuestro riesgo de enfermedades crónicas. Pero es posible que demasiadas personas no sepan lo que constituye una comida saludable. La medida de la FDA ayudará a educar a más estadounidenses para mejorar los resultados de salud, abordar las disparidades de salud y salvar vidas”, aseguró.

 “Tenemos que lograr que todos entiendan que la nutrición es salud y la alimentación es medicina”, dijo Becerra.

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