Personal del Comité del 6 de enero confiesan que Liz Cheney tiene fuerte fijación sobre Trump

Algunos de los empleados que trabajan para el Comité Selecto del 6 de enero expresaron su frustración con relación a la representante Liz Cheney, quien también es la vicepresidenta del Panel, por centrar demasiado el informe final en el expresidente Donald Trump, a pesar de que según revelaron existen otros aspectos que surgieron de las investigaciones.

The Washington Post se acercó con varios empleados que trabajaron y otros que aún colaboran con el Comité Selecto que investiga la insurrección del Capitolio el 6 de enero de 2021 y quienes deben elaborar un informe final con toda la evidencia, documentación y los testimonios para entregarlo en el mes de diciembre.

Según la información publicada por el diario, el personal confesó su frustración así como su molestia con la representante Liz Cheney, ya que afirmaron que tiene una fijación en contra del expresidente Trump y solo quiere escribir al respecto.

En sus declaraciones destacan que Cheney ha ejercido un control considerable sobre la investigación, desviándola del objetivo original de investigar fallas de seguridad el 6 de enero y dirigiéndola a un ataque contra el expresidente Donald Trump.

“Todos venimos de trabajos prestigiosos dejando lo que estábamos haciendo porque nos dijeron que esta sería una importante investigación de investigación que informaría al público. Pero cuando [el Comité] se convirtió en una campaña Cheney 2024, muchos de nosotros nos desanimamos“, describió uno de los empleados al The Washisngton Post.

En otras declaraciones aseguraron que el testimonio realizado en verano por la exasesora de la Casa Blanca, Cassidy Hutchinson fue idea de Cheney y exaltar sus declaraciones, sobre todo la parte en la que Donald Trump hizo “la rabieta” por querer regresar al Capitolio para reunirse con sus seguidores y al decirle que no, jaló a uno de los miembros del Servicio Secreto.

Tras esta publicación, el portavoz de Cheney, Jeremy Adler respondió sobre las cuestionamientos de las intenciones de su jefa hacía el expresidente y dijo que Trump representaba una grave amenaza.

“Donald Trump es el primer presidente en la historia de Estados Unidos que intenta anular una elección e impedir la transferencia pacífica del poder. Entonces, maldita sea, Liz está ‘priorizando’ comprender lo que hizo y cómo lo hizo y asegurarse de que nunca vuelva a suceder”, expresó.

Tim Mulvey, el portavoz del Comité, envió una declaración en donde comentó que los miembros del Panel continúan trabajando en todo el material, así mismo calificó de cobardes y desleales a todos los disidentes internos.

“Han olvidado sus deberes como servidores públicos y su cobardía está ayudando a Donald Trump y otros responsables de la violencia del 6 de enero. Los nueve miembros del comité continúan revisando los materiales y contribuyendo al borrador del informe, que abordará todos los aspectos clave de la investigación del Comité. Las decisiones sobre el contenido del informe recaen en última instancia en los miembros bipartidistas del Comité, no en el personal”, redactó en un comunicado.

Liz Cheney es una de las críticas más feroces de Donald Trump y una de los dos republicanos que se unieron al Comité, que se desintegrará a fines de este año. Hasta el momento, el trabajo de la representante de Wyoming junto con el Panel, así como su constante desafío hacía Trump han elevado su perfil nacional y se ha ganado los elogios de algunos demócratas.

La hija del exvicepresidente Dick Cheney tuvo la mala fortuna de perder las primarias en Wyoming ante su oponente, Harriet Hageman respaldada por Trump. En septiembre anunció que posiblemente se lanzaría para una candidatura presidencial y cada vez que tiene una oportunidad critica los movimientos del expresidente.

Con información de The Washington Post