Los posibles candidatos demócratas para las elecciones presidenciales de 2024
Si Joe Biden no lanza su candidatura en 2024 para la reelección existen otros demócratas que darían fuerte batalla en la contienda y se podían enfrentar a Trump o DeSantis por parte de los republicanos
El primer candidato oficial a la presidencia para las elecciones del 2024 por parte de los republicanos es Donald Trump, pero hasta el momento nadie más ha declarado que buscará estar en la boleta para llegar a la Casa Blanca dentro de dos años. Si Joe Biden no confirma ser el candidato por los demócratas, existen otros funcionarios que podrían dar una fuerte batalla, según algunos medios de comunicación.
Las encuestas han demostrado que los votantes no le darían su voto a Donald Trump o Joe Biden, porque prefieren que la Casa Blanca sea ocupada por alguien más.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis es uno de los grandes favoritos para enfrentar a Trump para las primarias republicanas, y hasta podría arrebatarle el deseo de un segundo mandato al expresidente. Entre los demócratas aún nadie ha dicho que busca la presidencia.
Joe Biden, 80 años
El presidente acaba de cumplir años el 20 de noviembre, si se postula lo haría con casi 82, y es una de las razones de que los votantes no estén a favor de su reelección, aunque su edad no significa que no tenga la capacidad de mandato.
Un análisis elaborado por importantes medios de comunicación e información expusieron que existen otros demócratas que podrían convertirse en el candidato demócrata para las elecciones presidenciales de 2024.
Kamala Harris, 57 años
Desde que se convirtió en la vicepresidenta de Estados Unidos su perfil se elevó para ser la potencial candidata a la presidencia en 2024. A pesar de algunos errores, que señalan en los medios de comunicación, que ha cometido durante el tiempo que lleva el cargo, la popularidad de Harris entre los votantes es alta, sobre todo entre los afroamericanos.
Harris no ha extendido su deseo de ser la candidata por los demócratas y apoyaría al presidente Biden si busca un segundo mandato.
Gavin Newsom, 55 años
El gobernador de California, acaba de ganar las elecciones intermedias para continuar en el cargo y esto ha elevado su perfil a nivel nacional. Expresó que no está interesado en postularse para la candidatura presidencial y le daría su apoyo a Biden si busca la reelección, Newsom sería un fuerte contendiente.
“Ha criticado a su propio partido por ser demasiado pasivo en sus batallas con los republicanos, lo que ha llevado a la especulación de los medios de que está sentando las bases para una campaña presidencial en 2024 o 2028”, informó CalMatters, una organización sin fines de lucro de California.
Michelle Obama, 58 años
La primera dama de 2009 a 2017: “Se hizo un nombre a través de iniciativas para mujeres, familias saludables, educación superior y educación internacional de niñas adolescentes, y siguió siendo una figura popular y abierta incluso después de que terminó la presidencia de su esposo”, dijo la revista Stylist.
En repetidas ocasiones ha dicho que no se postularía para la Casa Blanca, sin embargo, sigue siendo “muy apreciada entre los demócratas” y obtiene una alta puntuación en las encuestas de campos teóricos, destacó CNN. Michael Bender de The Wall Street Journal asegura que los republicanos le temerían si ella lanzara su candidatura.
Pete Buttigieg, 40 años
Para The Washington Times, quien podría destacar como candidato demócrata es Pete Buttigieg, quien fue nombrado Secretario de Transporte en la administración del presidente Biden.
“Al hombre se le ha dado una plataforma masiva para mostrar sus habilidades políticas y de comunicación como la cara pública del gasto en infraestructura de $1 billón que es muy popular y recibió votos bipartidistas”, escribió el diario.
Buttigieg podría presentarse como el candidato centrista capaz de ganarse a los votantes indecisos, “sigue labrándose un espacio potencialmente atractivo en la política demócrata”, dijo The Washington Post , refiriéndose a sus apariciones en Fox News, donde ha disputado puntos de conversación conservadores de manera tranquila.