Qué tan grave es el error que detectó la NASA en código del telescopio James Webb

La NASA informó que detectó un error de software en el telescopio espacial James Webb que obligó a detener las labores de investigación que implican el uso de este instrumento lo que retrasará las observaciones y descubrimientos de nuevos exoplanetas y galaxias. 

Los científicos de la Agencia Espacial explicaron que el problema que identificaron afecta al espectrógrafo NIRISS (Near Infrared Imager and Slitless Spectrograph). Explicaron que el resto de componentes e instrumentos de medición se encuentran en perfecto estado y por tanto podrán ser utilizados para futuras investigaciones.

A fin de poder solventar la falla la NASA indicó que se encuentran trabajando en conjunto con la Agencia Espacial de Canadá, los cuales fueron los responsables de la fabricación del espectrógrafo.

“No hay indicios de ningún peligro para el hardware, y tanto el observatorio como los demás instrumentos se encuentran en buen estado. Las observaciones científicas afectadas se reprogramarán”, informó la NASA.

¿Qué fallos ha presentado el telescopio espacial James Webb?

Desde su lanzamiento en diciembre de 2021 el telescopio James Webb ha presentado múltiples inconvenientes que han afectado su capacidad para observar el espacio. Entre estas fallas se encuentra la ocurrida en agosto de 2022 cuando uno de los segmentos del Instrumento del Infrarrojo Medio (MIRI) comenzó a dar señales de fricción.

Como consecuencia de ello dicho componente tuviera que ser desactivado mientras se realizaba una revisión que permitiera identificar el motivo del problema.

Posteriormente también se registró otra falla de software que activaba el modo seguro del telescopio impidiendo que los científicos pudieran trabajar con normalidad. Casi dos semanas más tarde los expertos pudieron encontrar la causa del error y solventarla.

Si bien la actual falla supone un problema para las labores de observación, es necesario aclarar que los científicos aún cuentan con un gran volúmen de datos recopilados que tienen que analizar.

Esto se explica debido al gran volumen de datos que ha logrado enviar el James Webb, el cual se calcula que desde su inicio de operaciones ha mandado varios terabytes de datos e información valiosa para la comunidad científica.

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