Autoridades en San Bernardino: “Nos superó la nieve”
Poco a poco la gente de este condado regresa a la normalidad; el martes se anunció la primera muerte producto de la histórica tormenta invernal
Mientras la normalidad regresa a las montañas del condado de San Bernardino, California, tras histórica tormenta invernal, las autoridades anunciaron el miércoles la primera muerte relacionada con la misma, que también ocasionó la escasez de comida, combustible, agua y medicina; además de colapsar techos, carreteras y caminos, provocar rescates de emergencia y la posibilidad de peligrosas avalanchas.
Representantes de la Oficina del Sheriff del condado de San Bernardino no identificaron a la víctima mortal de la tormenta ni su lugar de residencia, pero dijeron que 10 personas adicionales habían muerto durante la tormenta debido a problemas de salud existentes.
Por su parte, la agencia de respuesta a la tormenta de la zona anunció el martes 7 de marzo que el 90 por ciento de las carreteras y caminos habían sido limpiados de nieve y en algunas zonas el esfuerzo había abierto las zonas en un 100 por ciento.
“Hemos aprendido la lección. Lo que pasó es que la nevada cayó demasiado rápido, ocasionando que nuestras máquinas no se dieran abasto. Nos superó la nieve”, comentó Dan Munsey, jefe del departamento de bomberos del condado de San Bernardino, durante una conferencia de prensa.
Los esfuerzos por limpiar 500 millas de carretera bajo el control del Condado y 173 millas bajo el control del Departamento de Transporte de California (Caltrans), han resultado en la reapertura de algunas carreteras a residentes locales solamente sin escolta.
Las autoridades invitaron a la comunidad a rastrear los esfuerzos en su portal de internet el cual incluye mapas interactivos para ubicar también centros de distribución de comida, albergues de la Cruz Roja, y recolección de basura, entre otros servicios.
La Supervisora del distrito 3 del condado de San Bernardino, Dawn Rowe, instó a la comunidad a ayudarse entre sí y a utilizar la línea de ayuda (909) 387-3911, la cual está disponible las 24 horas del día los siete días de la semana.
Desde el lunes 27 de febrero pasado, la Oficina de Emergencia del Condado de San Bernardino comenzó a coordinar esfuerzos para abastecer de comida, combustible y medicamento a las ciudades de Big Bear, Crestline, y Lake Arrowhead, entre otras zonas. Este trabajo requirió el cierre de carreteras para agilizar las maniobras.
El cierre de caminos se debió también a la enorme acumulación de nieve tras el paso de la histórica tormenta invernal, que dejó hasta 12 pies de altura en ciertas zonas, dijeron las autoridades. Los esfuerzos por abrir las carreteras se vieron empañados por la densa neblina, y el fuerte y gélido viento, agregaron.
La situación obligó a las autoridades estatales a declarar la zona en estado de emergencia, lo que significó el arribo de ayuda monetaria y maquinaria pesada para agilizar el trabajo. Con la ayuda llegaron también miembros de la Guardia Nacional a la zona de Lake Arrowhead, en donde se registró una acumulación de nieve de 10 pies de altura.
La supervisora Rowe dijo que la situación aún es seria ya que existen hogares y negocios con acumulación de nieve en los techos, lo que podría propiciar colapsos. Tal como ocurrió en la única tienda de abarrotes Goodwin and Son’s, en la comunidad de Crestline, la semana pasada.
La acumulación de nieve dejó atrapadas a cientos de familias que desesperadamente buscaron ayuda. Debido a las tormentas en todo el sur de California, los recursos fueron limitados ya que no se pudo recibir colaboración de condados aledaños, dijeron las autoridades.
Según el jefe del sheriff del condado de San Bernardino, Shannon Dicus, hasta el lunes pasado se habían ejecutado 17 operaciones de rescate en las áreas de Big Bear, Twin Peaks, Lytle Creek, y Víctor Valley.
Algunas de las personas atrapadas en sus vehículos fueron ubicadas en caminos no pavimentados, lo que requirió el uso de helicópteros, dijeron las autoridades. Al menos cuatro senderistas fueron rescatados en zonas prohibidas al público, agregaron.
Algo positivo
Entre tanta adversidad surge algo positivo: el nivel de agua del lago de Big Bear se ha venido incrementando. En los últimos días el lago registró un aumento de cuatro pies, explicó el Distrito de Agua de Big Bear. En efecto, el nivel del agua del lago aumentó de 55.35 pies de altura en enero 3, a 59 pies el 6 de marzo pasado.
El bajo nivel del agua había preocupado a las autoridades ya que las zonas montañosas dependen del lago para atraer el turismo local, nacional e internacional. El lago no ha registrado niveles máximos desde 2011.
Poco a poco la normalidad va llegando a la región y con ello los miles de visitantes que intentan satisfacer su gusto por la nieve; sin embargo, las autoridades recomendaron tomar medidas extremas y estar preparados para evitar problemas en el camino.