“He vivido una vida larga, satisfactoria y hermosa”; la exsupervisora Gloria Molina enfrenta dura pelea contra el cáncer

Gloria Molina ha estado recibiendo tratamiento durante tres años en el centro oncológico City of Hope; la exsupervisora publicó este martes que lucha contra un cáncer terminal

La exsupervisora Gloria Molina inspira a las mujeres hispanas de Los Ángeles y California.

La exsupervisora Gloria Molina inspira a las mujeres hispanas de Los Ángeles y California. Crédito: Aurelia Ventura/Archivo | Impremedia

La política hispana Gloria Molina, quien fue una pionera como integrante de la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles por 23 años, anuncio este martes que enfrenta una difícil pelea contra un cáncer terminal.

Molina, de 74 años, hizo el anuncio en sus redes sociales. En su comunicado, la también exmiembro del Concejo Municipal de Los Ángeles declaró que ha estado recibiendo tratamiento durante tres años en el centro oncológico City of Hope, pero mencionó que el cáncer, en este momento, se ha presentado muy agresivo.

“He vivido una vida larga, satisfactoria y hermosa”, expresó la exconsejera en su declaración publicada en su página de Facebook, dirigida a sus más queridos amigos y a la querida comunidad.

La política hispana afirmó en su escrito que, pese a su actual situación de salud, no se encuentra triste.

“Estoy realmente agradecida por todos en mi vida y orgullosa de mi familia, carrera, mi gente y el trabajo que hicimos en nombre de nuestra comunidad”, mencionó Gloria Molina en su escrito.

La política hispana dijo que tiene una hija, un nieto, y uno más en camino.

Molina se convirtió en 1982 en la primera hispana elegida para la Asamblea de California, en 1987 en el Concejo Municipal de Los Ángeles y en la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles, como representante del Distrito 1 por 23 años, de 1991 a 2014.

La hispana creció en Pico Rivera y fue representante de una parte importante del Valle de San Gabriel en el distrito que abarca desde Koreatown, Pico-Union y el este de Los Ángeles hasta el este de Pacoima.

Gloria Molina comenzó su trayectoria política en la década de 1970 y participó activamente en el inicio del movimiento chicano; fue defensora de los problemas de salud de las mujeres mexicoamericanas que fueron esterilizadas contra su voluntad en el Centro Médico LAC+USC.

Molina creó un Programa de tutoría de enfermeras en colegios comunitarios locales para abordar la escasez de enfermeras.

El director ejecutivo de la Fundación Weingart, Miguel Santana, dijo que Gloria Molina fue una inspiración para él cuando estudiaba la escuela secundaria, y tuvo oportunidad de trabajar para ella por 13 años cuando fue supervisora.

La actual concejal de Los Ángeles, Eunisses Hernández, al enterarse de la declaración de Molina sobre su enfermedad, dijo que encontró apoyo en los hombros de quienes los precedieron, como es el caso de la supervisora Molina.

“Abrió el camino para las mujeres, especialmente para las hispanas, en el gobierno local, y le debemos una deuda de gratitud por su décadas de servicio a nuestra ciudad y nuestro condado”, declaró Hernández.

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