La ciudad de Bellingham prohíbe las drogas después de la muerte de un niño relacionada con fentanilo
Funcionarios aprobaron una ordenanza mediante la cual, inyectar, ingerir o inhalar drogas duras en público, se tipifica como delito, lo cual se contrapone a la ley de despenalizar el consumo de sustancias adictivas
La muerte de niños relacionadas con el consumo de fentanilo causó indignación entre la comunidad y se optó por tomar medidas extremas para frenar las adicciones. Crédito: PATRICK T. FALLON | AFP / Getty Images
Bellingham, ciudad identificada por ser una de las más liberales no sólo de Washington sino de todo el país, optó por adoptar medidas urgentes para ponerle un alto al incremento en los casos de sobredosis de drogas en que se han visto inmersos algunos de sus habitantes, pero lo alarmante es que un gran número de ellos son niños.
De acuerdo con el semanario impreso Cascadia Dail, recientemente el departamento de bomberos de la ciudad informó que, entre enero y el 12 de abril, atendió al llamado de la ciudadanía para hacerle frente a 223 casos relacionados con sobredosis, es decir a 2.5 llamadas por día.
Por su parte, la policía alertó sobre individuos muertos con espuma saliendo de su boca.
Quizá la gota que derramó el vaso fue el deceso de dos adolescentes y una niña de cinco años, quienes en marzo consumieron una sobredosis de fentanilo.
Al respecto, Edwin Williams, miembro del consejo de la ciudad, le indicó al periódico New York Post que las sobredosis se han vuelto tan comunes que una víctima permaneció muerta durante horas sin nadie se diera cuenta o intentará brindarle atención.
“Un hombre estaba sentado en la acera en un estacionamiento con la cabeza agachada, al aire libre… y un oficial de policía me dijo que había estado muerto durante al menos 12 horas. Eso me conmocionó hasta la médula”, mencionó.
Lo cierto es que, en la ciudad ubicada a una hora al sur de la frontera con Canadá, cada vez resulta más común ver a decenas de individuos quienes debido a sus adicciones han perdido empleos, familias y hasta el techo que hasta hace poco los cobijaba.
Por ello, los funcionarios de la ciudad aprobaron una ordenanza mediante la cual, “inyectar, ingerir o inhalar” drogas duras en público, se tipifica como delito, algo que se contrapone a la ley estatal aprobada hace dos años donde se despenaliza la posesión de drogas.
“La combinación de COVID, la omnipresencia del fentanilo y el cambio de la ley estatal, llevó todo al límite. Fue simplemente la tormenta perfecta y en algún momento, había que hacer algo”, enfatizó Williams.
Con las nuevas reglas, serán arrestados quienes sean sorprendidos consumiendo drogas duras como fentanilo o metanfetamina en público.
También te puede interesar:
La policía de Texas confirmó que hay varias víctimas en un tiroteo ocurrido en un centro comercial cerca de Dallas
• Mueren 7 personas atropelladas cerca de refugio para inmigrantes en Brownsville, Texas
• Identifican como venezolanos a la mayoría de los fallecidos por atropello frente a centro de inmigrantes en Texas
