Un adulto murió en Georgia a causa de una rara ameba devoradora de cerebros

La víctima no identificada estaba infectada con Naegleria fowleri, una ameba que destruye el tejido cerebral, causa inflamación del cerebro y, por lo general, la muerte, de acuerdo con un comunicado de prensa de las autoridades sanitarias

Un adulto murió en Georgia a causa de una rara ameba devoradora de cerebros

La Naegleria fowleri es una ameba que destruye el tejido cerebral, causa inflamación del cerebro y, por lo general, la muerte. Crédito: Mario Tama | Getty Images

El Departamento de Salud de Georgia informó que un residente murió de una infección cerebral causada por una rara ameba devoradora de cerebros, de la que probablemente se infectó cuando nadaba en un lago o estanque de agua dulce.

La víctima no identificada estaba infectada con Naegleria fowleri, una ameba que destruye el tejido cerebral, causa inflamación del cerebro y, por lo general, la muerte, de acuerdo con un comunicado de prensa de las autoridades sanitarias.

Este es el sexto caso de la infección en Georgia desde 1962.

La infección mortal es rara, solo unas tres personas en los Estados Unidos la contraen cada año, “pero estas infecciones suelen ser fatales”, dijo el departamento de salud.

Las autoridades dijeron que la víctima “probablemente se infectó mientras nadaba en un lago o estanque de agua dulce”, pero no dijeron dónde. Tampoco informaron exactamente cuándo ocurrió la muerte.

Las personas pueden infectarse cuando el agua que contiene la ameba sube por la nariz de una persona. No pueden infectar si se ingiere y no se transmite de persona a persona.

“La ameba se produce naturalmente y no existe una prueba ambiental de rutina para Naegleria fowleri en cuerpos de agua; y debido a que es muy común en el medio ambiente, los niveles de amebas que se producen de forma natural no se pueden controlar”, dijeron funcionarios de salud.

“La ubicación y el número de amebas en el agua pueden variar con el tiempo dentro del mismo cuerpo de agua”, agregaron.

Los funcionarios no dieron a conocer ninguna información adicional sobre la víctima.

Naegleria fowleri se encuentra con mayor frecuencia en agua por encima de los 80 grados Fahrenheit, en todo el mundo. En los Estados Unidos, la mayoría de las infecciones han sido causadas por esta bacteria hallada en agua dulce en los estados de la franja sur.

El incidente marcó al menos la segunda muerte confirmada de Naegleria fowleri en poco más de un mes. En junio, un niño de dos años murió a causa de una ameba devoradora de cerebros después de una visita a una fuente termal de Nevada, dijeron funcionarios estatales.

Los investigadores creen que el niño contrajo la infección en Ash Springs, que se encuentra a unas 100 millas al norte de Las Vegas.

A principios de este año, el Departamento de Salud de Florida informó un caso de Naegleria fowleri y dijo que la persona estaba infectada “posiblemente como resultado de las prácticas de enjuague nasal con agua del grifo”.

El año pasado, hubo tres casos confirmados de Naegleria fowleri que se cree que ocurrieron después de la exposición al agua dulce en Iowa, Nebraska y Arizona, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. También se informaron tres casos cada año en 2019, 2020 y 2021.

Los CDC dicen que entre 1962 y 2022, se informaron 157 casos de Naegleria fowleri en los EE. UU. De esos casos, solo dos personas se infectaron después de enjuagar los senos nasales con agua del grifo contaminada.

Los síntomas de una infección de este tipo incluyen dolor de cabeza severo, fiebre, náuseas y vómitos y progresan a rigidez en el cuello, convulsiones y coma que pueden conducir a la muerte.

Los síntomas comienzan alrededor de cinco días después de la infección, pero pueden comenzar entre 1 y 12 días después de la infección. Progresan rápidamente y pueden causar la muerte en cinco días.

Las personas que eligen nadar pueden reducir su riesgo de infección al limitar la cantidad de agua que les sube por la nariz. Los CDC recomiendan no saltar ni zambullirse en cuerpos de agua dulce, así como taparse la nariz y mantener la cabeza fuera del agua.

Las personas también deben evitar excavar o remover el sedimento en agua dulce tibia y poco profunda. Es más probable que las amebas vivan en sedimentos en el fondo de lagos, estanques y ríos.

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