Cómo hacer proteína casera en polvo para aumentar músculos
La proteína es un micronutriente esencial que juega un papel importante en el crecimiento, la reparación y el mantenimiento de los tejidos del cuerpo. Las que encontramos en establecimientos pueden contener azúcar añadida, calorías o incluso sustancias químicas tóxicas que pueden ser peligrosas para la salud
El mercado ha visto un aumento significativo en las ventas de proteínas en polvo y cuando vas al gimnasio es frecuente que te puedan ofrecer añadir una buena proteína en polvo a tu dieta. Si bien pueden ser buenos para su salud, pueden ser pesados para su bolsillo.
Hay un montón de alimentos ricos en proteínas y no siempre es necesario tomar un suplemento para satisfacer tus necesidades. Incluso si deseas cumplir con sus requisitos diarios o necesita más proteínas para la reparación muscular, puedes hacer proteína en polvo en casa.
La proteína es un micronutriente esencial que juega un papel importante en el crecimiento, la reparación y el mantenimiento de los tejidos del cuerpo. La proteína en polvo es un suplemento dietético elaborado a partir de diversas fuentes de proteínas, como agua de leche, caseína, fuentes de origen vegetal como la soja, los guisantes, el arroz o el cáñamo, y más alimentos de este tipo.
Generalmente, es utilizado por personas que desean agregar más proteínas a su dieta. En general, se recomienda a las personas que tomen una o dos cucharadas o más de proteína en polvo, según sus requisitos.
Así puedes preparar proteína en polvo
Con esta receta podrás preparar proteína en polvo que te servirá como suplemento:
Ingredientes:
- 1 taza de avena arrollada
- Almendras
- Media taza de semillas de calabaza o semillas de girasol
- 1/2 taza de legumbres secas como lentejas, chana dal
- Media taza de trozos de coco seco
- 1/4 taza de semillas de chía o semillas de lino
- 1-2 cucharadas de cacao en polvo
- canela al gusto
- Endulzante (miel o sirope de arce) al gusto
Preparación:
1. Primero, precalienta el horno a 350°F (175°C). Coloca la avena, las frutas secas y las legumbres secas en una bandeja para hornear. Tuéstalos en el horno durante unos 10-15 minutos o hasta que se vuelvan dorados y fragantes.
2. Deja que la mezcla se enfríe y póngala en la licuadora junto con las hojuelas de coco deshidratadas, las semillas de chía o lino, o cualquier cosa que esté usando.
3. No dejes trozos grandes y cuela la mezcla si es necesario. Y tu proteína en polvo casera está lista.
4. Transfiéralo a un recipiente hermético y guárdalo en un lugar fresco y seco.
Puedes usar esta proteína en polvo casera en batidos, batidos, yogur, avena o incluso en recetas que requieran proteína en polvo y ten en cuenta que debes considerar que la textura o el sabor de este polvo casero puede ser ligeramente diferente al producto disponible en el mercado.
La proteína en polvo puede producir efectos secundarios
Si bien el propósito de las proteínas en polvo es proporcionarle a su cuerpo una cantidad suficiente de nutrientes, a veces pueden desencadenar ciertos efectos secundarios. Según la Escuela de Medicina de Harvard, las proteínas en polvo pueden contener azúcar añadida, calorías o incluso sustancias químicas tóxicas que pueden ser peligrosas para la salud.
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