Camila Fernández defiende su legado
La hija de El Potrillo atiende al llamado de la sangre y debuta con un álbum en el género ranchero
Camila Fernández no entiende por qué a mucha gente le molesta que ella sea cantante. Después de todo, eso es lo único que ha visto en sus 25 años de vida.
“Siento que la gente está acostumbrada a verlo en otras profesiones: el papá es doctor y el hijo va a ser doctor, o una familia de futbolistas, o de maestros”, dijo la hija del intérprete Alejandro Fernández, a su vez, hijo del fallecido ídolo mexicano, Vicente Fernández. “No sé por qué a la gente le da un poco de coraje que yo venga de una familia de cantantes; sigo sin entenderlo, no es como que yo lo elegí”.
Lo que sí eligió Camila fue seguir el camino de su abuelo y de su padre, y hasta el de su hermano mayor, quien se hace llamar Álex Fernández para distinguirse de su padre Alejandro.
De hecho, Camila comenzó a cantar antes que Álex. Ella lleva ocho años de carrera, mientras que su hermano unos cuantos menos. La única diferencia es que Camila comenzó cantando un género que no era el que dio a conocer a su popular familia. Ella decidió experimentar con música pop y hasta con el género urbano, que mezclaba con sonidos del mariachi.
Pero el llamado de la música ranchera fue más fuerte, sobre todo luego de la muerte en diciembre de 2021 de su venerado abuelo.
“A mi papá y a mi abuelo les gustó lo que yo estaba haciendo, pero mi abuelo me dijo, ‘está padre, pero hazme un disco de mariachi'”, contó la artista durante una reciente visita a Los Angeles. “Era algo de lo que hacía con todos los nietos, pero con ‘covers’; yo le dije que sí, pero le dije que con mis canciones”.
El abuelo se sorprendió cuando supo que la mayor de sus nietas escribía canciones rancheras, mientras que para ella “fue una aventura enseñarle a mi abuelo de lo que estoy hecha y de lo que soy capaz”.
Así fue como nació “Camila Fernández”, el álbum debut de Camila en el género ranchero. Incluye 20 temas, diez ‘covers’ y diez inéditos, de los cuales nueve son de la autoría de la intérprete.
Al abuelo le tocó escuchar parte del disco, porque luego de que se enfermó, Camila detuvo el proyecto. Fue hasta hace unos meses que decidió retomarlo, cuando le ofrecieron cerrar el Festival Corona Capital en Guadalajara, un concierto de música internacional —mayormente en inglés— que terminaría, precisamente, con un set de mariachi.
Fue la primera vez que Camila cantó música ranchera en vivo.
“Dije si me va bien, puede que saque las canciones que le había prometido a mi abuelo en un álbum”, dijo. “Y me fue increíble, y pues saqué el álbum de mariachi”.
Los diez ‘covers’ de “Camila Fernández” son temas que ella ha cantando en las fiestas familiares desde que era pequeña. Son también los que interpretó en el Corona Capital y los que espera transmitirle a su hija Cayetana, de 3 años, para que la niña también los ame y los cante. Entre ellos están “Fue tan poco tu cariño”, de Rocío Dúrcal, y “Si quieres”, de Juan Gabriel.
Por su parte, las canciones que escribió, tienen como hilo conductor las diferentes facetas y etapas del amor.
“El sentimiento que rige este álbum es el amor”, dijo. “En todas sus facetas: enamorada, despechada, burlándote del amor”.
El sueño de Camila es lograr algún día el reconocimiento y estatus de su abuelo y de su padre. Quiere llevar su música a todos los rincones del mundo.
“Estoy agradecida, estoy orgullosa de portar este apellido”, dijo, “Espero que algún día, con mi trabajo honesto, ponga el nombre de México en alto, como mi papá y mi abuelo”.