Empleados mexicanos imitan a sindicatos de EE.UU. y… ¡acorralan a Audi!

Los trabajadores de Audi en el céntrico estado de Puebla vieron en el logro laboral de los vecinos del norte, que se presumió apoyado por el presidente Joe Biden, una oportunidad para exigir un incremento idéntico y con un apoyo similar del Ejecutivo local Andrés Manuel López Obrador, quien ha triplicado el salario mínimo en su mandato

Empleados mexicanos imitan a sindicatos de EE.UU. y… ¡acorralan a Audi!

Estallaron la huelga el 24 de enero pasado al rechazar el aumento del 6.5% que ofreció la empresa alemana. Crédito: Shutterstock

MÉXICO- La información corrió como pólvora y aterrizó en los escritorios de los sindicatos mexicanos. Acto seguido, el sindicato de Audi en el país siguió el ejemplo de la United Auto Workers (UAW) que logró un aumento salarial del 25% histórico en Estados Unidos con el cual se ufanó de doblegar a las armadoras General Motors, Ford y Stellantis.

Los trabajadores de Audi en el céntrico estado de Puebla vieron en el logro laboral de los vecinos del norte, que se presumió apoyado por el presidente Joe Biden, una oportunidad para exigir un incremento idéntico y con un apoyo similar del Ejecutivo local Andrés Manuel López Obrador, quien ha triplicado el salario mínimo en su mandato.

Estallaron la huelga el 24 de enero pasado al rechazar el aumento del 6.5% que ofreció la empresa alemana y se llevó todos los reflectores: los analistas creen que es una petición histórica porque en otras condiciones no se hubieran atrevido a pedir un incremento tan alto, de hecho, no hay antecedentes

“La forma en que se resuelva este conflicto va a marcar una línea de acción en la industria local”, observó Willebaldo Gómez, analista de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México.

A la huelga en Audi le precede un acuerdo al que llegaron trabajadores en Silao, Guanajuato, con  General Motors, quienes fueron los primeros en obtener un aumento del 10%, activando el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC).

Los empleados mexicanos están envalentonados por diversas razones, según análisis. En primer lugar, porque desde la renegociación del tratado comercial regional los sindicalistas de EE.UU. empujaron a su gobierno a forzar al mexicano a “desprecarizar” la mano de obra barata que los deja en desventaja y combatir a los sindicatos charros o fachada de las empresas.

Con la reforma laboral hubo mejoras en ese sentido pero aún falta mucho por homologar los salarios de manera regional. En la industria automotriz mexicana, por ejemplo, un obrero percibe un salario promedio de tres dólares por hora, mientras que en Estados Unidos y Canadá, las empresas deben pagar 15 dólares.

“La opción que le queda al trabajador para mejorar su vida laboral es formar sindicatos y negociar con su empleador para buscar mejores oportunidades de empleo”, dijo el director de la Social Accountability International, Luis Venegas.

¿MOMENTO IDEAL?

El traslado de empresas desde Asia a México por las políticas estadounidenses de Nearshoring que incluyen incentivos fiscales ha generado condiciones de ventaja competitiva a México y la demanda de mano de obra es cada vez mayor.

La industria automotriz es el eslabón más visible de lo que México puede aportar: es el séptimo productor de automóviles a nivel mundial que se nutre de 930,000 trabajadores.

Por otro lado, los constantes incrementos al salario mínimo que ha promovido López Obrador durante su mandato no ha disparado la inflación, como temían las predicciones más conservadoras y en cinco años el salario oficial del mexicano que menos gana se quintuplicó.

De acuerdo con las estadísticas de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos el incremento se dio de la siguiente manera: en 2019,16%; en 2020: 20%;  2021:15%; 2022: 22%; 2023:20%; 2024: 20%.

“El incremento al salario mínimo ha desencajado los tabuladores en las empresas. Los salarios medios se están convirtiendo en salarios muy cercanos al salario mínimo y esto está complicando los escenarios laborales”, deduce Manuel Fuentes, fundador de la asociación civil Corporativo de Estudios y Asesoría Jurídica.

Al principio de la huelga de Audi México, la compañía intentó declararla “inexistente”, pero con el paso de los días, Tarek Mashhour extendió una invitación a la representación sindical para “retomar las pláticas de negociación” que en principio ignoró, según Cesar Orta, líder del Sitaudi.

Audi México arrancó operaciones en 2016 en San José Chiapa, Puebla y es una de las modernas del mundo con más de 5,351 empleos directos que se enfocan en ensamblar el modelo Q5 que se exporta a todo el mundo y, de los cuales el 70% está sindicalizado y la mayoría gana en promedio entre uno y dos salarios mínimos al día.

PUNTO DE FUGA

A pesar del optimismo para mejorar las condiciones del salario en México, la organización Acción Ciudadana Frente a la Pobreza (Acifp) alerta que aún existe una situación que podrían aprovechar empresas para mejorar los salarios: la informalidad. Es decir: trabajo sin contrato.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo alrededor de 32 millones de personas económicamente activas en México se encuentran en condiciones de informalidad. En porcentajes totales significa el 55%.

Esto permite que alrededor de cuatro de cada 10 trabajadores no tengan un salario digno al ganar menos de 20,000 pesos al mes (unos 1,300 dólares) al no tener contratos formales, observa Acifp.

De acuerdo con el Instituto mexicano del Seguro Social a alrededor del 39% de los trabajadores mexicanos no les alcanza para comprar dos canastas básicas y por ello no pueden superar el umbral de pobreza.

El reporte temático del Observatorio de Trabajo Digno detalla que los sectores de la economía que caen en esquemas de trabajo informal son principalmente la Construcción, con el 59% de trabajadores con sueldo precario; la agricultura y ganadería, con el 53% y los servicios.

“Es muy llamativo que todos estos sectores, considerados algunos de los dinámicos de nuestra economía tenga la mayor cantidad de personas con trabajo formal sin salario suficiente, esto afecta a la mitad de su personal”, dijo Paulina Gutiérrez, integrante de la organización.

En el caso de Audi y Volkswagen de México, que forman parte del mismo consorcio, el esquema de trabajo informal no es parte de su estructura ni podría serlo porque es una empresa internacional bajo muchos reflectores.

En tiempos recientes también es investigada porque recibieron una ayuda poco transparente por parte del gobierno de Puebla que equivale a casi el 50% de lo destinado al ramo de economía.

Sigue leyendo

Estas son las empresas que presionan a México con el nearshoring
. Audi RS 6 Avant GT: 660 unidades a nivel mundial para una exclusividad única

En esta nota

Audi Puebla
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain