Récord histórico del Porsche Cayenne EV en Reino Unido
El Porsche Cayenne eléctrico aún no ha debutado oficialmente, pero ya hizo historia en una de las pistas más icónicas del automovilismo británico

Porsche Cayenne. Crédito: Porsche. Crédito: Cortesía
Pocos lo vieron venir. En un ambiente dominado por la tradición, los motores rugientes y la precisión británica, un prototipo camuflado y eléctrico irrumpió sin previo aviso para arrebatar un récord que parecía intocable.
Lee también: Primeros Tesla autónomos ya circulan en Austin
Se trataba del próximo Porsche Cayenne eléctrico, que sin siquiera haber sido presentado oficialmente, ya se coronó como el SUV más rápido en la mítica subida de Shelsley Walsh, en Reino Unido.
Puedes leer: De esta forma el Xiaomi SU7 hace historia en Gran Turismo
No hubo anuncios, ni ruedas de prensa. Solo una participación inesperada en la categoría “Road Cars Series Production Electric” del Campeonato Británico de Hill-Climb, que dejó a todos con la boca abierta.
El prototipo de Porsche, aún cubierto por vinilos para esconder sus formas definitivas, logró completar el recorrido de 914 metros en apenas 31,28 segundos, un tiempo que lo coloca por encima de cualquier otro SUV que haya competido allí.
Detrás del volante estuvo la piloto profesional y desarrolladora de Porsche en Fórmula E, Gabriela Jílková, quien no solo fue clave en la ejecución técnica del ascenso, sino que también ayudó a validar las capacidades dinámicas del vehículo en condiciones reales de competencia.
Rompió marcas sin preparación de competencia
Este logro cobra aún más valor si se considera que el vehículo no fue modificado para competencia. No llevaba jaula antivuelco, ni neumáticos de competición, ni ningún tipo de adaptación. Incluso montaba una parrilla de techo, algo que en teoría penaliza la aerodinámica.
Y sin embargo, destronó al Bentley Bentayga W12, que hasta entonces ostentaba el récord de SUV con un tiempo de 35,53 segundos. El Cayenne EV no solo bajó ese tiempo en más de cuatro segundos, sino que también superó el tiempo de un deportivo eléctrico de producción: el Porsche Taycan Turbo S, que tenía una marca de 31,43 segundos en el mismo recorrido.
Un prototipo que ya habla por sí mismo
La hazaña deja en evidencia que el futuro SUV de Porsche no es simplemente una reinterpretación eléctrica del Cayenne tradicional.
Es un vehículo con aspiraciones claras de liderazgo en dinámica, aceleración y eficiencia energética, todo con un diseño aún bajo secreto. Las únicas pistas visibles en su paso por Shelsley Walsh fueron sus líneas generales, la parrilla en el techo, los faros enmascarados y un camuflaje que cubría casi toda la carrocería.
Además, el modelo emitía un sonido artificial claramente perceptible, no porque tenga un sistema de escape real, sino porque debe cumplir con normativas que exigen a los vehículos eléctricos alertar a los peatones de su presencia.
Tecnología compartida, pero con ambición propia
Este Cayenne eléctrico se basa en la plataforma PPE (Premium Platform Electric), desarrollada conjuntamente por Porsche y Audi, que también sirve de base para el Macan eléctrico. Se espera que utilice un sistema de tracción total mediante doble motor eléctrico, alimentado por una batería de alto voltaje.
Aunque Porsche no ha revelado las cifras de potencia ni autonomía, el comportamiento del vehículo en Shelsley Walsh sugiere que las especificaciones estarán por encima de lo convencional para un SUV de lujo.
La aceleración fue una de las más destacadas: el prototipo alcanzó los primeros 18 metros en solo 1,94 segundos, según reportes del evento. Esa cifra es similar a la de autos de competición profesional.
El rendimiento se vio reforzado por la suspensión activa, que controló el balanceo de la carrocería de forma ejemplar.

En muchos vehículos eléctricos, el bajo centro de gravedad que impone la batería mejora la estabilidad, pero Porsche ha ido un paso más allá con una configuración que minimiza las transferencias de masa y permite una tracción precisa en curvas cerradas y pendientes pronunciadas.
Una pista con historia, un récord para el futuro
La subida de Shelsley Walsh, inaugurada en 1905, es la más antigua del mundo aún en uso. El trazado de 914 metros (exactamente 1.000 yardas) presenta un desnivel de 100 metros y una inclinación máxima del 16 %. Es un escenario técnico, exigente y con curvas estrechas que demandan aceleración, control y una puesta a punto refinada.
Históricamente, ha sido dominada por vehículos de combustión interna. Por eso, ver a un SUV eléctrico —aún en fase de desarrollo— imponerse con tal claridad marca un cambio de era.
Un adelanto de lo que vendrá en 2025
A pesar del desempeño público, Porsche mantiene en secreto los detalles técnicos y el diseño final del Cayenne EV. La marca ha confirmado que su presentación oficial ocurrirá en algún momento de 2025, en un evento global donde también se anunciarán renovaciones importantes para la gama Cayenne con motores de combustión interna.
Esto confirma que el Cayenne actual no será reemplazado inmediatamente, sino que coexistirá con su hermano eléctrico durante varios años más. De hecho, Porsche ha indicado que seguirá ofreciendo versiones de gasolina del Cayenne al menos hasta 2030, para atender mercados donde la transición eléctrica avanza más lentamente.
Seguir leyendo:
Toyota alerta sobre el impacto real de los autos eléctricos
Tesla, en riesgo por giro regulatorio de Donald Trump
Ford Mustang 2026: un viaje al pasado con estilo retro