Santa Claus llega a Anaheim
Y llegó Santa Claus. Pero no se crea que era un viejo gordo, panzón, divertido y sonriente con un costal repleto de regalos.
¡De eso nada! Algo mejor. Llegó el dueño de los Angels que no pudo esperarse hasta la noche de Navidad para darle su regalo a los fieles seguidores del equipo rojo y blanco de Anaheim.
Entonces de entre el tumulto del protocolo emergieron Albert Pujols y CJ Wilson, sonrientes y elegantemente trajeados.
Pujols, una superestrella de la pelota, el sueño de todos y Wilson, un nativo de California que dejó millones en la mesa para venir a jugar cerca de su familia.
!Vaya regalos que trajo Santa Claus, -para el caso Arturo Moreno-, el hombre que subió el listón del presupuesto de su equipo de 140 casi hasta 175 millones con el fin de darle a sus seguidores, el regalo que a su juicio merecen. Un regalo de 129.5 millones.
“La alegría de la gente paga cualquier esfuerzo Son leales y sabemos que aquí estarán para ayudarnos y darnos un impulso siempre”, dice Moreno.
No serán los fans de Anaheim el niño que pide a Santa que le traiga de regalo una mejor computadora para diseñar mejor sus tareas escolares, pero sí se parecen en algo cuando se evoca a los vecinos del Angel Stadium sufriendo en el cierre del calendario porque faltaba un bateador que resolviera las dudas y remolcara las carreras de la victoria. La historia de los postergados. La paradoja amarga del que quiere y no puede.
Y entonces el delirio. Pujols recibio la camisa número 5 y CJ Wilson la 33. Pujols, la blanca con vivos rojos. Wilson la roja con vivos blancos.
La gente cree que Santa Clasus adelantó los regalos de Navidad ¿Siente que lo tratan como Santa Claus?
[Le parece divertido]. “No sé si es así pero algo vi en un periódico. La gente disfruta y ya disfrutaremos más cuando estos hombres estén defendiendo nuestro equipo en el campo. Espero que sea algo grande”, dice un hombre que al tratarlo de cerca parece increíble que en tanta sencillez quepa semejante agudeza para los negocios.
Y es que esto de pagarle 25.4 millones por año a Pujols podría no dejar dormir a nadie. Sin embargo, los cálculos pasan por la estretegia de marketing que ayer mismo trazó sus parámetros. Así como Arturo Moreno, sin barba y panza, afinó su calculadora para tomar la decisión más agresiva en la historia de las finanzas de los Angels, muchos padres formaron cola para comprar con avidez la camiseta del cinco de los Angels: Pujols. Soldout después de dos horas.
