Escuelas retiran relojes analógicos porque los alumnos no saben leer las horas
Los niños se exponen a tecnología a edades cada vez más tempranas, lo que puede frenar su aprendizaje y desarrollo motriz
Vivimos en la era de las pantallas y la tecnología, lo que, de alguna forma, está teniendo un efecto negativo en la educación de los menores.
Los niños saben todos los trucos sobre apps y juegos, pero todo lo que no sean redes sociales o estar conectados se les escapa. El mundo analógico quedó atrás para ellos. Tanto es así que en escuelas del Reino Unido se están instalando relojes digitales en las salas de examen porque los alumnos tienen dificultades para leer relojes analógicos y saber cuánto tiempo les queda.
Malcolm Trobe, secretario general adjunto de la Asociación de Líderes Escolares y Universitarios (ASCL), explicó a The Telegraph que los estudiantes menores de 18 años se han acostumbrado a usar dispositivos digitales y, como tal, un reloj digital.
“La generación actual no es tan buena para leer un reloj tradicional como las generaciones anteriores. Están acostumbrados a ver una representación digital del tiempo en su teléfono, en su computadora. Casi todo lo que tienen es digital, por lo que los jóvenes están expuestos a una representación del tiempo en forma digital”.
Trobe, que es también ex director de escuela, afirma que los maestros quieren que sus alumnos estén lo más relajados posible en el entorno de un examen. Y un reloj tradicional podría agregar estrés innecesario. Las escuelas están tratando de hacer que todo sea “lo más fácil y sencillo posible”, agregó.
“No quieres que levanten la mano para preguntar cuánto tiempo queda”, explicó Trobe.
Stephanie Keenan, directora de inglés de la escuela secundaria Ruislip, en el noroeste de Londres, le contó al mencionado medio que su escuela es una de las muchas que cambiaron sus relojes. Cheryl Quine, jefa de departamento en la Escuela de Cockermouth y presidenta de la Red West Cumbria, confirma que también hicieron los mismo en su centro.
Aunque la lectura de las horas del reloj se enseña en la escuela, Trobe informa de que muchos estudiantes aún no pueden leerlos cuando llegan a la escuela secundaria.
A principios de este año, Sally Payne, la principal terapeuta ocupacional pediátrica de NHS de Inglaterra, advirtió que a los niños les resulta cada vez más difícil sostener y usar bolígrafos como resultado de la tecnología.
“Para poder agarrar un lápiz y moverlo, necesitas un fuerte control de los músculos finos de tus dedos. Los niños necesitan desarrollar esas habilidades”, advirtió.
“Es más fácil darle un iPad a un niño que animarlo a jugar con sus manos y músculos, como construir bloques, cortar y pegar, o jalar juguetes y cuerdas. Debido a esto, no están desarrollando las habilidades básicas que necesitan para agarrar y sostén un lápiz “.
La tecnología es un avance, para los niños y los adultos. Sin embargo, se debe controlar su uso para no llegar al punto de que sea algo perjudicial en el desarrollo de nuestros hijos