Defendiendo lo indefendible: aseguran que la prensa magnificó la fiesta de Neymar y que “solo” asistirán 150 personas
La agencia organizadora quiere alivianar la tensión que hay alrededor del evento... sin éxito
La polémica fiesta que Neymar organizará para despedir el 2020 y que reunirá a 150 personas, cuenta con los permisos necesarios y cumplirá todas las normas sanitarias necesarias para prevenir el contagio de COVID-19, aseguró la empresa responsable por su organización.
Esta reacción se dio como respuesta a las duras críticas internacionales que el atacante de la selección brasileña ha recibido por organizar una apoteósica y multitudinaria fiesta en momentos en que Brasil roza los 200.000 muertos por la pandemia.
Según la propia empresa, también se ha magnificado la dimensión del evento, también llamado “Neymarpalooza” o “El evento más imbécil del año”.
Neymar arma fiesta de cinco días y 500 invitados; lo bautizan como "el imbécil del día"https://t.co/wrj8fGRBUX pic.twitter.com/jD4t7PMMfm
— La Afición (@laaficion) December 26, 2020
La prensa brasileña aseguró que la fiesta tendría una duración de 5 días a partir del 25 de diciembre y reuniría a cerca de 500 personas al ritmo de populares y conocidos grupos musicales en una discoteca subterránea.
La agencia agregó que “se trata de un evento privado, con acceso exclusivo para invitados y para el que no se vendieron entradas”, y que obtuvo “todas las licencias de los órganos competentes necesarias para su realización, así como lo ha hecho en otros eventos privados que ha organizado en Río de Janeiro y Ceará”
Las aclaraciones que reducen la dimensión de la fiesta y el número de convidados no han detenido las críticas a Neymar y las advertencias de que su nueva polémica provocará nuevos daños a su imagen y a su reputación en momentos muy delicados.
Hagamos varias fiestas en el tercer país con más contagios de coronavirus. ¿Qué podría salir mal? 🙄https://t.co/nNzGY1x7wZ
— Sopitas (@sopitas) December 27, 2020
Más allá de la dimensión del evento, Neymar está promoviendo una fiesta en el segundo país con más muertes por coronavirus en el mundo, que sufre una segunda ola de la pandemia mucho más severa y en momentos en que las alcaldías cancelaron todos sus eventos de despedida de año y recomendaron evitar cualquier tipo de aglomeración.