Todo el mundo del fútbol habla de ello, pero… ¿qué es el Fair Play Financiero?
¿En realidad funcionan as reglas de la UEFA para crear un fútbol menos disparejo?
Desde que el fútbol europeo se llenó de fondos de inversión del Medio Oriente, magnates rusos, corporativos chinos con recursos ilimitados, etcétera, etcétera… la UEFA tuvo que recurrir a algún recurso legal para evitar una inflación desorbitada en todas las ligas del viejo continente y entonces, creó el Fair Play Financiero.
Este término, ahora tan famoso se acuñó en el 2010 y consiste en una serie de reglas financieras que permiten a la UEFA tener conocimiento de los ingresos y los egresos de cada club, evitando así que los dueños o corporativos multimillonarios que están detrás de algunos equipos, pongan de su propio capital para pagarle a los jugadores como ya ocurrió a mediados de la década de los 2000 cuando el magnate petrolero Román Abramóvich adquirió al Chelsea.
#FCB 🔵🔴
— Diario SPORT (@sport) August 24, 2020
🧐 El City estaría estudiando la manera de poder fichar a Messi
💰 El 'fair play' financiero es el principal obstáculo a salvar para los de Manchester https://t.co/RbSjgUzbMP
Es fácil: el club debe generar las ganancias suficientes para poder pagarle a su plantilla, incluso pueden pasarse hasta por $5.5 millones de dólares si está totalmente cubierto por una contribución/pago por parte del propietario del club o la persona relacionada.
Claro, los equipos más populares del mundo generan mucho más ganancias y entonces su Fair Play Financiero es más “sano” por decirlo de alguna forma y tienen mayor margen de maniobra para pagar sueldos fuera de serie, como el caso de Leo Messi o Cristiano Ronaldo, activos que cobran mucho pero que también es gracias a ellos que las ganancias de sus clubes son mucho mayores.
Imagínalo por un momento. pic.twitter.com/dq6bTHAc2j
— Sphera Sports (@SpheraSports) January 5, 2021
Es una medida polémica, pero la UEFA sostiene que hay diferencias importantes entre las capacidades financieras de cada país y cada liga que no regula el Juego Limpio Financiero e incluso admite que el objetivo no es hacer que todos los clubes sean similares en tamaño y activos, sino invertir buscando el éxito en el mediano y largo plazo y no una solución inmediata con fichajes de emergencia a precios elevados que generan inflación en todo el mundo del fútbol.