“El Inge”, exjefe de escoltas del Chapo se declaró culpable de narcotráfico en Estados Unidos
Felipe Cabrera Sarabia fue detenido en 2011 en Sinaloa, y nueve años después se llevó a cabo su extradición
Cabrera Sarabia podría enfrentar una pena mínima de 10 años de prisión y hasta cadena perpetua. Crédito: Yuri Cortez | AFP / Getty Images
Aquellos días en que Felipe Cabrera Sarabia, también conocido como “El Inge” gozaba de la total confianza de Joaquín “El Chapo” Guzmán y era su jefe de escoltas ha quedado muy atrás, pues ahora ambos pagan por haber pertenecido a una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo: el Cártel de Sinaloa. Y es que recientemente este hombre se declaró culpable de narcotráfico en Estados Unidos.
A sus 51 años, “El Inge” se declaró culpable ante una corte federal de Chicago de haber distribuido más de 150 kilogramos de cocaína y más de 30 kilos de heroína en territorio estadounidense, por lo que podría enfrentar una pena mínima de 10 años de prisión o como su excolaborador “El Chapo”, recibir cadena perpetua. Será el próximo 7 de julio cuando se realice la audiencia de sentencia.
Como Guzmán Loera, Cabrera Sarabia dijo en una audiencia, con ayuda de un intérprete, a la jueza Sharon Johnson Coleman, que él se había ganado toda la vida como ganadero (“El Chapo” dijo que era agricultor) pero finalmente, se declaró culpable.
Fue a finales de 2011 cuando el también conocido como “El señor de la Sierra” o “El rey de la heroína”, fue detenido en el estado de Sinaloa. Nueve años después, en 2020, se realizó su extradición a Estados Unidos. El 16 de junio de ese año se declaró inocente de los delitos que se le acusan.
En aquella audiencia, encabezada por la jueza María Valdez, a cargo de una causa donde figuran más de 20 exintegrantes de los cárteles de Sinaloa y de los Beltrán-Leyva, se le leyeron los cargos.
Acusaciones en México
De acuerdo a la Fiscalía General de la República (FGR), “El Inge” era el encargado de la distribución de droga del Cártel de Sinaloa en Chihuahua y Durango, además otros crímenes pesaban sobre él.
Presuntamente era jefe de la célula delictiva identificada como Los Cabrera, junto a sus hermanos Luis Alberto, Alejandro y José Luis Cabrera Sarabia. Pero Felipe tenía algo particular: la crueldad.
En México, el capo también estaba acusado de homicidios, inhumaciones clandestinas, secuestros, extorsiones, quema de negocios y viviendas. Presuntamente era el encargado de torturar y asesinar a grupos rivales de su organización, incluidos sus familiares.
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