Kia advierte a conductores sobre riesgos de incendio en asientos: ¿cuál es el motivo?

La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA) de Estados Unidos ha emitido una advertencia urgente para los propietarios de casi 463,000 vehículos Kia Telluride.

Este modelo de SUV, producido entre 2020 y 2024, presenta un defecto en el sistema de ajuste eléctrico del asiento del conductor, lo que puede provocar incendios.

La preocupación principal radica en el interruptor del asiento del conductor, que puede quedar bloqueado, causando un sobrecalentamiento del motor de accionamiento.

Este problema puede ocurrir tanto con el vehículo en movimiento como estacionado, aumentando el riesgo de incendio. La NHTSA ha registrado seis incidentes donde el motor se ha derretido y en un caso el asiento se incendió.

Aunque no se han reportado lesiones, la gravedad del defecto ha llevado a Kia a recomendar a los propietarios que aparquen sus vehículos en la calle y lejos de otros coches o edificios hasta que se complete la reparación.

Kia ha anunciado que la campaña de revisión comenzará el 30 de julio de 2024. Las reparaciones incluirán el refuerzo de la cubierta del interruptor y la sustitución de la palanca de accionamiento defectuosa. Los propietarios no incurrirán en ningún costo por estas reparaciones.

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Esta llamada a revisión sigue a una similar en marzo de 2024, que afectó a cerca de 430,000 unidades del mismo modelo debido a un defecto en la transmisión.

Riesgo de incendio en el sistema de ajuste del asiento

El Kia Telluride, conocido por su popularidad en el mercado estadounidense, no se comercializa en Europa. No obstante, Motorpasión se ha puesto en contacto con Kia para confirmar si otros modelos pueden verse afectados por problemas similares. La respuesta a esta consulta aún está pendiente.

La seguridad automotriz es una prioridad, y los fabricantes deben tomar medidas proactivas para garantizar que sus vehículos no representen riesgos para los conductores y el público.

Las llamadas a revisión son comunes en la industria automotriz y reflejan el compromiso de los fabricantes y las autoridades reguladoras con la seguridad del consumidor.

En el caso del Kia Telluride, la rápida acción de la NHTSA y la respuesta de Kia subrayan la importancia de la vigilancia continua y la disposición para corregir problemas potencialmente peligrosos.

Los propietarios de vehículos deben estar atentos a las notificaciones de revisión y seguir las recomendaciones para garantizar su seguridad y la de quienes los rodean.

Este incidente es un recordatorio de la complejidad de los sistemas modernos en los automóviles y la necesidad de un mantenimiento riguroso y oportuno.

En conclusión, la situación del Kia Telluride pone de manifiesto los desafíos que enfrentan los fabricantes de automóviles en la gestión de defectos y la importancia de la comunicación efectiva con los consumidores.

Mientras se espera la implementación de las soluciones correctivas, los propietarios deben seguir las recomendaciones de seguridad para minimizar los riesgos hasta que sus vehículos sean reparados adecuadamente.

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