El peligro en el polvo

ext-9


Lo que flota en el aire de tu casa podría ser dañino para tu salud. Aquí te mostramos cómo mantener tu hogar limpio y seguro.

By Kevin Loria, Daniel Wroclawski

Cuando un rayo de sol ilumina de manera perfecta, los ves: pequeñas partículas de polvo suspendidas en el aire. Parecen inofensivas, hasta que te detienes a pensar en cómo se acumulan en todas las superficies de tu casa.

Si observas de cerca esas partículas, podrías hasta ver piel, pelo y caspa, dice Gabriel Filippelli, PhD, director ejecutivo del Environmental Resilience Institute de la Universidad de Indiana en Bloomington. Si observas más de cerca, con un microscopio electrónico o realizas un análisis químico, descubrirás cosas más perturbadoras: fragmentos de pintura con plomo y otros metales pesados, microbios, hongos, moho, ácaros, microplásticos, sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS), e incluso toxinas de algunos pesticidas, dice Filippelli, quien ayuda a supervisar un proyecto que analiza el polvo que las personas recolectan en sus aspiradoras.

Debido a que estas sustancias están en el polvo en todo nuestro alrededor, también terminan en nuestro cuerpo. Los químicos del polvo en nuestras manos pueden llegar a nuestros alimentos y ser absorbidos por nuestro cuerpo a través de la piel. Los niños ingieren polvo mientras se mueven en el suelo. Y todos lo respiramos, dice Elizabeth Matsui, PhD, quien investiga la contaminación en el interior del aire en la Escuela de Medicina Dell de la Universidad de Texas en Austin.

Toda esta exposición tiene consecuencias. A corto plazo, el polvo puede ocasionar irritación pulmonar, alergias y asma. A largo plazo, algunas sustancias químicas que contiene están relacionadas con la diabetes, varios tipos de cáncer, problemas reproductivos y otros problemas de salud graves.

Si bien los seres humanos hemos estado expuestos al polvo desde que nacimos, muchos de los químicos nocivos que actualmente se encuentran en el polvo de nuestra casa son subproductos de nuestro mundo actual. Y esto ayuda a explicar por qué un problema tan viejo, como limpiar superficies llenas de polvo, debe ahora tratarse con mayor urgencia. 

Sin embargo, a diferencia de algunos problemas de salud ambiental que parecen estar fuera de nuestro control, limpiar el polvo de tu hogar es algo que en realidad si puedes hacer. Solo necesitas las herramientas necesarias.

¿Qué hay en el polvo?

Probablemente hayas notado que no importa cuántas veces limpies un estante o un piso, el polvo vuelve a aparecer, incluso en áreas que se usan poco. Esto plantea la siguiente pregunta: ¿De dónde viene todo ese polvo?

Aproximadamente la mitad del polvo en tu hogar viene del mismo interior de tu casa, dice Filippelli, principalmente de cuando cocinas, de las mascotas, las personas y los productos de consumo. El resto proviene, entra o es transportado a nuestros hogares desde el exterior.

Estudios químicos revelan que el polvo puede contener una amplia variedad de subproductos tóxicos de la naturaleza y la industria, dice Tasha Stoiber, PhD, científica senior del Environmental Working Group.

Esto incluye los PFAS de las alfombras y otros productos tratados con estos químicos para hacerlos resistentes a las manchas y al agua, así como retardantes de llama como el PBDE de los productos electrónicos y muebles. Otras sustancias químicas preocupantes son los ftalatos y el bisfenol A (BPA) que se encuentran en los plásticos que hay en nuestro hogar, además de compuestos orgánicos volátiles que se liberan en forma de gas provenientes de muebles o pinturas, y los hidrocarburos aromáticos policíclicos, que son subproductos que se producen al quemarse ya sea al cocinar, fumar o por incendios forestales.

Cómo te pueden hacer daño las pequeñas partículas

Es difícil documentar con exactitud cómo la exposición a esta variedad de químicos en el polvo afecta la salud, dice Andrea Gore, PhD, profesora de farmacología y toxicología en la Universidad de Texas en Austin. Sin embargo, señala que la exposición prolongada a algunos de los compuestos peligrosos del polvo se ha relacionado con “problemas de salud serios que llegan con la edad” como la diabetes y la enfermedad de Parkinson.

El plomo y otros metales pesados ​​pueden tener efectos particularmente peligrosos en los niños, causando daños neurológicos y contribuyendo a trastornos del aprendizaje y del comportamiento. Ciertos PFAS se han relacionado con algunos tipos de cáncer, sistema inmunitario débil, problemas de tiroides y enfermedades hepáticas. Los ftalatos están relacionados con problemas reproductivos. Los microplásticos y nanoplásticos que se consumen o inhalan están asociados con problemas cardiovasculares, enfermedad inflamatoria intestinal y otros posibles riesgos para la salud. Los retardantes de llama pueden afectar el desarrollo de los niños y se han relacionado con problemas reproductivos y con un mayor riesgo de cáncer.

Cuando se ingieren partículas de polvo, los químicos pueden ser absorbidos a través del intestino y entrar en los tejidos de nuestro cuerpo, dice Matsui. Las partículas más pequeñas, asociadas con enfermedades cardiovasculares, pueden penetrar profundamente en los pulmones y pasar al torrente sanguíneo. Cualquier partícula inhalada también puede provocar problemas respiratorios como el asma en personas de cualquier edad. De hecho, la contaminación del aire– incluyendo no sólo los contaminantes a los que estamos expuestos cuando estamos al aire libre, sino también los que están en nuestros hogares– está vinculada a millones de muertes en todo el mundo cada año.

Donde vives también importa. Las personas expuestas a más polvo y contaminación, tanto en el interior como en el exterior, corren un mayor riesgo de sufrir problemas de salud, dice Matsui. Por lo tanto, el polvo y la contaminación del aire son una preocupación importante para las personas que viven en áreas en donde los incendios forestales son más comunes, así como para aquellas que están expuestas a la contaminación industrial.

En Estados Unidos, estos efectos suelen ser más graves en comunidades marginadas y de bajos ingresos, esto se debe a que están cerca de fuentes de contaminación en el aire, y también porque sus viviendas suelen tener menos ventilación, debido a que no tienen aire acondicionado central, además de otros factores, según un informe del National Academies of Science, en el que colaboró Matsui.

Aunque la calidad del aire donde vives puede estar fuera de tu control, puedes reducir los riesgos del polvo en tu hogar con un poco de planificación y tomando decisiones inteligentes. Por ejemplo, Stoiber y sus colegas del EWG descubrieron que después de que entró en vigor una ley en California que limitaba el uso de productos químicos retardantes de llama en muebles, los hogares que cambiaron a muebles que cumplían con la nueva ley, vieron una reducción significativa en los niveles de estos químicos en el polvo. Después de seis meses, algunas concentraciones de retardantes de llama disminuyeron aproximadamente en un 50%.

Otras medidas que pueden ayudar a reducir el polvo en tu hogar incluyen el quitarse los zapatos antes de entrar, usar de forma estratégica deshumidificadores y purificadores de aire, y elegir una aspiradora y otras herramientas adecuadas para controlar el polvo.

El resultado de combinar varios pasos pequeños puede generar importantes beneficios para la salud, según el informe del National Academies of Science.

¿Qué tan grande es tu problema de polvo?

Una forma de tener una idea de lo que está flotando en el aire de tu hogar es mediante el uso de un monitor de calidad del aire. Estos dispositivos suelen detectar contaminantes como dióxido de carbono y compuestos orgánicos volátiles. Pero algunos también pueden medir las partículas, conocidas como polvo.

Para encontrar un monitor de calidad del aire para el interior que detecte polvo, busca uno que en la etiqueta diga PM2.5 o PM10. Eso significa que puede identificar partículas de 2.5 o 10 micrómetros de diámetro, respectivamente. A continuación se muestran dos de estos monitores que han dado buenos resultados en las pruebas de CR. Para obtener mejores resultados, coloca el monitor donde más te preocupe la calidad del aire. Y considera comprar varios monitores para colocarlos en las habitaciones que usas con más frecuencia, como tu cuarto, la cocina y la oficina de tu casa.

Temtop Air Quality Monitor M100-US

Detects: Carbon dioxide, humidity, PM2.5, PM10, temperature

The Temtop Air Quality Monitor M100-US performs well across the board in our tests. It’s easy to use, offers a data-rich display (it’s not a touchscreen, though), monitors most of the important air quality metrics, and shows an AQI score. It also has a smartphone app to view readings and a built-in rechargeable battery, so you can easily move the monitor around your home.

INKBIRD 6 in 1 Indoor Air Quality Monitor PTH-9A

Detects: Carbon dioxide, humidity, PM2.5, PM10, temperature

The Inkbird 6 in 1 Indoor Air Quality Monitor is the only one we evaluated that doesn’t connect to the internet or have a smartphone app. You might find that appealing if you’re concerned about digital privacy or simply don’t like connected gadgets. The only downside is that no historical data is saved. Despite that shortcoming, this Inkbird offers a great display for viewing current readings, monitors most of the important air quality metrics, and displays an AQI score. It also offers a built-in rechargeable battery, so you can easily move it around.

Nota del editor: Este artículo también fue publicado en la edición de agosto del 2024 de la revista Consumer Reports.

Consumer Reports is an independent, nonprofit organization that works side by side with consumers to create a fairer, safer, and healthier world. CR does not endorse products or services, and does not accept advertising. Copyright © 2024, Consumer Reports, Inc.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain