Comunidad Trans angustiada frente a Trump pero advierten que darán la pelea
La orden ejecutiva del presidente afecta a 1.6 millones de personas trans; y los anula en asuntos legales, atención médica y sitios de educación
En su discurso inaugural, el presidente Donald Trump declaró que a partir de ese día, la política de Estados Unidos será la siguiente: “solo hay dos sexos: masculino y femenino”.
Más tarde ese mismo día, firmó una orden ejecutiva que reconoce solo a hombres y mujeres biológicos lo que, según afirmó, “defendería a las mujeres” y “garantizaría su seguridad”.
Durante la videoconferencia “Dos sexos solamente. Orden ejecutiva ataca a la gente transgénero” organizada por Ethnic Media Services, varios expertos y líderes hablaron de las implicaciones políticas de la orden ejecutiva de Trump, el impacto en sus vidas y cómo planean responder.
“Pueden implementar las políticas que quieran y puedan, pero no van a derrotar lo que somos como personas”, dijo Bamby Salcedo, presidenta y directora ejecutiva de la Coalición TransLatin@.
Señaló que para la Translatin@ Coalition, una de las organizaciones trans más grandes en el país que ofrece prestación de servicios comunitarios, hace investigación de políticas e imparte capacitación en transformación cultural, se trata de reaccionar a la orden ejecutiva de Trump con el diseño de estrategias que combatan todo lo que se les presente.
Como sobreviviente de encarcelamiento, desamparo, trabajo sexual para sobrevivir, suicidio, sobredosis, persecución en el barrio como muchos miembros de su comunidad, dijo que la población trans es gente poderosa.
“Individual y colectivamente tenemos poder sin importar todo el ruido que se está dando. Esperamos empoderar sobre todo a las personas jóvenes que se sienten con miedo e inseguras y les recuerdo que estamos paradas sobre los hombres de guerreras con mucha fortaleza y vamos a prevalecer y a continuar siendo quienes somos”.
Puede generar violencia
Ilan H. Meyer, profesor en el Williams Institute y en la Universidad de Columbia, dijo que estiman que hay cerca de 1.6 millones de personas mayores de 13 años que se identifican como transgéneros, y 1.2 millones como no binarios y un millón de intersexuales.
“La orden ejecutiva es brutal. La definición de sexo biológico en el momento de la concepción, es biológicamente ridícula, porque no hay sexo en el momento de la concepción. No sé cómo se les ocurrió esa definición que no permitiría a las personas tener pasaportes que se alineen con su género”.
DIjo que cualquiera que conozca a personas transgénero saben que su viaje es una experiencia extremadamente estresante debido al acoso que pueden experimentar.
“Bajo la nueva orden ejecutiva, a los prisioneros transgénero se les prohibirá estar en prisiones y cárceles que estén alineadas con su género, y lo mismo ocurrirá con las personas que busquen refugios para personas sin hogar y otros tipos de servicios del gobierno federal”.
Señaló que también se ha prohibido el cuidado de salud de afirmación de género, que afectaría a los menores.
“La retórica antitrans puede llevar a un aumento de la violencia contra las personas LGBT en general, y las personas trans en particular”.
Dijo que en general la violencia contra las personas LGBT incluye un mayor uso de armas, violencia más grave y también más crímenes de odio.
“Todo esto tiene un gran impacto en el bienestar y la salud, ya que se da en un entorno social que se caracteriza por el prejuicio, el estigma, el odio y la violencia”.
De hecho, hizo ver que las personas transgénero tienen más probabilidades de haber sufrido acoso escolar en la infancia así como abuso sexual, terapias de conversión y discriminación cotidiana, que consiste en ser tratadas sin dignidad y maltratadas en sus interacciones diarias.
Un gobierno irresponsable
Jordan Willow Evans del Comité Ejecutivo, MassEquality, y quien es una mujer transgénero, líder política republicana, dijo que sabía que lo se trató de pasar en su primer periodo de gobierno, inevitablemente vendría de nuevo.
“Pero para mí, como mujer trans y estadounidense, alguien que presta atención activa a lo que hace mi país, especialmente a sus propios ciudadanos, esto es como ver un choque de trenes a paso lento. Lo único que podría haberlo evitado habría sido la derrota de Donald Trump en 2024”.
Así que dijo que ahora queda tratar de navegar en este nuevo mundo y, lamentablemente, no cree que vaya a ser muy fácil durante los primeros años.
“Hay tanta incertidumbre sobre lo que viene después porque todo va a quedar embotellado en el sistema judicial, y eso es, al menos para mí como republicana, es un gobierno absolutamente irresponsable, y es tirar de la alfombra a tus propios ciudadanos y paralizar efectivamente al gobierno con la indecisión”.
Enfatizó que esto no ayuda a los conciudadanos estadounidenses y es una farsa porque viene puramente a espaldas de un pueblo muy pequeño y muy marginado.
“Así que yo estaba angustiada cuando se hizo el anuncio. Todavía estoy angustiada hoy, y probablemente lo seguiré, pero no voy a dejar que detenga mi trabajo. Supongo que simplemente voy a trabajar más duro porque esto es inaceptable, y sé que nosotros como país somos mejores que esto”.
Aumenta la ansiedad
Gael Mateo Jerez-Urquia, guía de servicios del Proyecto TRANS en el Centro LGBTQ de San Diego, dijo que la orden ejecutiva generó numerosas preguntas en torno a cómo sería la atención médica amigable con el género y lo qué significa eso para nuestra comunidad intersexual y muchas más.
Pero observó que también le hizo pensar en su propia seguridad de aquí en adelante y en los próximos cuatro años.
“Es triste decirlo, creo que todos lo vimos llegar, y al ritmo que viene es muy aterrador y muy dañino”.
En medio de todo esto, dijo que han llamado a la comunidad para ver si están bien, y definitivamente después de las elecciones ha habido un aumento aún mayor de la ansiedad entre los jóvenes y los adultos con respecto a las órdenes ejecutivas.
Pretenden borrarlas
“Hemos recibido numerosas llamadas telefónicas de clientes que buscan información sobre el cuidado médico y lo que no pueden lograr en este momento”.PPr
Sailor Jones, director asociado de Common Cause North Carolina, dijo que se enteró de muchas de las órdenes ejecutivas mientras abría el correo después de trabajar frenéticamente durante las vacaciones para cambiar su marcador de género en su pasaporte antes de que Trump asumiera el cargo.
“Soy una de las pocas afortunadas que recibió su pasaporte mientras se estaban produciendo muchos de estos cambios. Aunque mi pasaporte sobrevivirá a esta administración, no tengo ni la menor idea de si sobrevivirá a las políticas, la retórica y lo que pueda suceder”.
Dijo que es increíblemente conmovedor que el poder ejecutivo de la nación intente borrar por completo la existencia de las personas transgénero bajo la ley, mientras que al mismo tiempo los culpa de todo, desde la falta de preparación militar hasta la reciente trágica colisión en el aire.
“Siento una rabia increíble así como por las deportaciones masivas que están sucediendo a nuestros amigos y vecinos inmigrantes. Sabemos que el objetivo de estas medidas ejecutivas son crear un clima de miedo e intimidación para que hagamos nuestras vidas más pequeñas”.
Frente a este ambiente, señaló que ahora más nunca es nuestro deber hacer que nuestras vidas sean más grandes y nuestras voces más fuertes.
“Y la pregunta es qué podemos hacer para construir esos espacios seguros y seguir avanzando”.
Jones, quien se someterá a una cirugía de confirmación de género a través del seguro médico que recibe por su trabajo, dijo que cualquier esfuerzo por eliminar la atención médica a la comunidad trans afectará en última instancia el acceso de todos.
Enfatizó que también es importante saber que, prácticamente, las principales compañías de seguros reconocen que la atención médica de afirmación de género para pacientes transgénero es médicamente necesaria y apropiada basado en la edad.
“Yo cumpliré 50 años en mayo y puedo tomar esas decisiones por mí misma. Afortunadamente, la administración Biden también reforzó las protecciones contra la discriminación para los pacientes transgénero, creando así elementos disuasorios para el personal médico para evitar el maltrato y que no reciba esa atención médica”.