La esposa de Ron DeSantis podría postularse para ser gobernadora de Florida
Jill Casey DeSantis, esposa del actual gobernador de Florida, analiza postularse para ocupar su lugar
Su experiencia como presentadora de televisión, le otorga una ventaja a Jill Casey DeSantis para postularse como gobernadora, pues sabe cómo dirigirse a la ciudadanía. Crédito: Phelan M. Ebenhack | AP
Ante la imposibilidad de que Ron DeSantis pueda prolongar su etapa como gobernador de Florida, su esposa analiza seriamente postularse para relevarlo en caso de obtener el respaldo suficiente por parte de los ciudadanos.
Durante una reunión celebrada la semana pasada entre varios de los donantes más importantes que han impulsado la carrera del actual mandatario estatal, fue puesto sobre la mesa el nombre de Jill Casey DeSantis para postularla en elecciones de 2026.
La cadena de televisión NBC News asegura que cinco personas familiarizadas con el evento de donantes sostienen que la posibilidad de ver a la expresentadora de televisión inmersa en campaña es real.
Sin embargo, eso podría generar asperezas entre Ron DeSantis y el presidente Donald Trump quienes recientemente parecen haber fumado la pipa de la paz después de atacarse mutuamente el año pasado cuando ambos contendían por la candidatura presidencial republicana.
Algunos analistas políticos proyectan que el jefe de la Casa Blanca tiene sus propios planes para Florida donde no está incluida la esposa de DeSantis.
Al parecer, el caballo de batalla elegido por Trump para impedir que los demócratas pudieran ganar Florida es el representante Byron Donalds.
Por si esto fuera poco, cobra fuerza la versión de que Wilton Simpson, actual comisionado de agricultura estatal, también está dispuesto a entrar en campaña.
De hecho, ya existe una fractura entre el experimentado político y el actual gobernador a raíz de que la Legislatura dominada por el Partido Republicano propuso un plan para despojar a DeSantis de la supervisión sobre el tema migratorio en el estado para dársela a Simpson.
Aunque falta todavía mucho tiempo para definir al próximo gobernador de Florida, para Ron DeSantis colocar a su esposa como su relevo le permitiría continuar bajo los reflectores de los medios informativos de cara a las próximas elecciones presidenciales ya sin Donald Trump relegándolo a segundo plano como sucedió el año pasado cuando, por más intentos que hizo, nunca logró alcanzarlo en las encuestas hasta terminar renunciando a sus aspiraciones.
Desde entonces, el político de 46 años ha tratado de que su imagen como gobernador se mantenga alejado del escándalo.
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