Papa Francisco recuerda a Juan Pablo II a 10 años de su muerte
"Su ejemplo y su testimonio están vivos entre nosotros"
Roma
El papa Francisco recordó a san Juan Pablo II como un ejemplo admirable de sufrimiento, un día antes del décimo aniversario de la muerte del pontífice nacido en Polonia, que libró una larga batalla contra la enfermedad de Parkinson.
“Lo recordamos como gran testimonio de Cristo sufriente, muerto y resucitado, y le pedimos de interceder por nosotros, por las familias, para la Iglesia, para que la luz de la resurrección brille sobre todas las sombras de nuestra vida y nos llene de alegría y de paz”, dijo el actual Papa. “Su ejemplo y su testimonio están siempre vivos entre nosotros”.
“Queridos jóvenes, aprendan a afrontar la vida con su ardor y su entusiasmo, queridos enfermos, lleven con alegría la cruz del sufrimiento como él nos enseño y ustedes queridos nuevos esposos, pongan siempre a Dios en el centro, para que vuestra historia conyugal tenga más amor y más felicidad”, dijo.
Turistas y peregrinos aplaudieron los elogios de Francisco a Juan Pablo durante una audiencia pública en la plaza de San Pedro del Vaticano.
“Volvió a la casa del Padre”
El 2 de abril de 2005 los medios de información recibían la noticia de que Juan Pablo II había muerto en sus dependencias privadas.
Los miles de fieles que se habían concentrado para rezar por el primer papa no italiano en la Plaza de San Pedro lo intuyeron cuando se encendió la luz de la ventana de los apartamentos papales en el palacio apostólico.
“Queridísimos hermanos y hermanas: a las 21.37 nuestro amadísimo Santo Padre Juan Pablo II ha regresado a la Casa del Padre. Recemos por él”, así lo anunció conmocionado Leonardo Sandri, el sustituto de la Secretaria de Estado y durante muchos años estrecho colaborador del papa polaco, a los fieles concentrados en la plaza con velas y rosarios.
Pocos minutos después sonaban las campanas de la basílica para anunciar al mundo la perdida.
Karol Wojtyla
Murió a los 84 años el 2 de abril de 2005. El pontífice tuvo 26 años de pontificado y fue santificado el año pasado.