Messi resuelve dilema del Barsa

El astro argentino impide la derrota en el minuto 91

BILBAO, España (EFE).- Leo Messi salvó ayer al FC Barcelona en el descuento del partido ante el Athletic Club en San Mamés, con el que fue su primer gol en campo bilbaíno y que estableció el 2-2 final tras un choque en el que los locales se adelantaron dos veces por medio de Ander Herrera y de Gerard Piqué (autogol), y el Barsa igualó en primera instancia con un tanto de Cesc.

A pesar del apuro de su equipo, el entrenador Josep Guardiola subray�� al final que el partido fue “un canto al futbol” y “uno de los mejores” que ha dirigido al frente del conjunto azulgrana.

“Ha sido un partidazo, de una exigencia extrema. Un maravilloso espectáculo gracias a 22 jugadores tan buenos. Cuando dos equipos van a ganar, el futbol es así de hermoso y el espectador es el que sale beneficiado”, señaló Guardiola.

Messi rescató con la aparición final uno de sus partidos más irrelevantes, aunque siempre dispuesto a amenazar a un rival que ayer tuvo un comportamiento que rozó lo heroico, igual que el Barsa sobre la cancha que, por el diluvio, exigió como pocas veces exige en los últimos tiempos un campo a los jugadores.

Además de perder dos puntos, lo que le deja a tres del Real Madrid en la punta de la tabla, el Barsa regresa a casa con el récord de imbatibilidad de Víctor Valdés detenido en 898 minutos.

En el partido, tuvo que ocurrir algo fuera del guión para que llegara la acción que derivó en el 1-0 al minuto 19.

Un resbalón de Mascherano permitió a Susaeta profundizar por su banda y encontrar a Herrera para que el exzaragocista buscase al ángulo y colocara el balón lejos de Valdés.

Luego, más por un error del Athletic que por acierto del Barsa, Abidal sacó un centro casi increíble por izquierda y Cesc conectó un cabezazo a la escuadra para el 1-1 al 23′.

Ya llegando al tramo final, el Athletic sacó un córner, la defensa visitante no despejó, el balón dio en Llorente y, tras tocar en Abidal, Piqué desvió contra su meta. 2-1 en el 79′.

Y cuando todo parecía terminado, con San Mamés en éxtasis despidiendo como héroes a Muniain y Llorente, llegó el tanto de Messi, al 91′, en el que colaboraron errores graves de Iturraspe, al inicio de la jugada, San José e Iriazoz, éstos con un mal entendimiento que dejó el balón en las botas del astro argentino.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain