Día de protestas y recortes en el LAUSD
Empleados, maestros, estudiantes, padres de familia, ven amenazados sus intereses con el plan de ajuste presupuestario.
Afuera de las oficinas centrales del Distrito Escolar Unificado de Los Angeles decenas de personas comenzaron desde bien temprano a hacer línea para asegurarse un espacio en la sala de audiencias donde hoy se discute en una sesión maratónica una serie de recortes al presupuesto de 2012-2013.
Manifestantes cerraron las calles aledañas al LAUSD, en el centro de Los Angeles, mientras los miembros de la Junta de Educación sesionaban.
En línea y con pancarta en mano estaban empleados clasificados –de cafetería, enfermería, de oficina, etc-, maestros, estudiantes de las clases para adultos, padres de familia que temen el recorte de los programas preescolares, entre otros. También había miembros del Sindicato de Maestros de Los Angeles (UTLA), de SEIU, y representantes de asociaciones de padres de diferentes áreas donde el distrito escolar tiene jurisdicción. Todos ellos ven amenazados sus intereses de una u otra manera en el plan de ajuste presupuestario que se debate hoy.
La sesión de los miembros de la Junta comenzó esta mañana con la revisión de solicitudes para escuelas chárter, pero también está en la agenda una propuesta del superintendente del LAUSD para colocar en la boleta electoral un impuesto a la propiedad que serviría para financiar la educación básica en Los Angeles ante la amenaza de recortes estatales, a menos que los votantes aprueben una iniciativa electoral que el gobernador Jerry Brown colocó para un impuesto temporal que genere fondos para educación.
A pesar de una infusión en los fondos estatales que redujo el déficit del LAUSD en $167 millones, el distrito planea enviar más de 11,700 notificaciones de despido a educadores y otros empleados, según indicó ayer el superintendente John Deasy en un comunicado.
Hoy la Junta votará sobre un plan presentado por Deasy para balancear el presupuesto, el cual se basa en proyecciones de ingresos que estima un déficit de $557 millones.
Sin embargo, en su comunicado Deasy explicó que los ingresos de la Lotería de California fueron mejores de los esperados y los costos de beneficios bajaron, lo cual ayuda a reducir el déficit estimado a $390 millones.