Iglesia de BVL planea obras comunitarias
Pero necesita saldar una hipoteca de casi un millón de dólares para desarrollar más rápido sus proyectos.
El pastor Jairo García, de la iglesia Cristiana Renuevo, señala los amplios terrenos en que visualiza obras comunitarias para BVL. Crédito: Cecilia Figueroa, Especial para La Prensa
Kissimmee – Una clínica médica pública, asilo para envejecientes, programa de vivienda para familias de bajos recursos, universidad comunitaria, guardería infantil.
Estos son algunos de las obras que visualiza para el 2016-2017 en Buenaventura Lakes (BVL), el pastor senior de la iglesia Cristiana Renuevo, Jairo García.
Esto, tras recibir la donación de 86 acres de terrenos, valorados en casi $14 millones, a los alrededores de su iglesia.
“Como humanos reconocemos que Dios funciona, pero en lo material se necesita un plan médico, no hay empleos, el que tiene un empleo no tiene plan médico, los hospitales están abarrotados. Nosotros sentimos esa carga y creemos que la prioridad número uno es construir la clínica antes que expandir la iglesia”, destacó García.
Para ello, García indicó que la iglesia necesita saldar una hipoteca de casi un millón de dólares para desarrollar más rápido sus proyectos. El pastor ya cuenta con doctores y especialistas médicos que se han comprometido para donar su tiempo al coincidir en la necesidad de esta clínica para gente de bajos recursos.
“Hemos hecho cinco o seis reuniones con doctores que han visto la necesidad en sus consultorios. Les parte el alma y quieren unirse para brindar su labor”, explicó el pastor, añadiendo que estudiantes de la Escuela Médica de UCF estarían involucrándose con la clínica.
La propiedad fue en su momento un campo de golf, que consta de lagos y alrededores de viviendas en la zona y que su propietario, Jim Mike, decidió donar a la iglesia a finales del 2011, sostuvo García.
Hace un año, la iglesia viene haciendo el mantenimiento de estos terrenos, por lo que el pastor hizo un especial llamado a los vecinos y transeúntes del área para que colaboren en el embellecimiento de este sector.
Describió como un tiempo de grandes obras que vendrán a revitalizar este sector, donde residen mayormente hispanos, especialmente puertorriqueño. “Es una etapa nueva, bien buena, queremos que todos se involucren, que la comunidad participe de las bendiciones que Dios está derramando sobre BVL”.
En el condado Osceola, al menos el 16% de la población —unos 43,002 personas—, son mayores de 60 años, según datos del censo del 2010 y se espera que este centro para envejecientes sirva para atender a la gran cantidad de adultos retirados que viven en esta comunidad. “Vamos a brindarles un sitio, afecto y que se les den las facilidades para que tengan un sitio aquí”, dijo García.
Indicó que el Concilio de Envejecientes de Osceola quiere involucrarse con este proyecto y que ha contactado al Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD) y otras agencias federales para lograr fondos para un proyecto de vivienda para familias de bajos recursos.
