Cárceles de California piden fin de intervención federal
Un juez dice que el Departamento de Prisiones ha hecho progreso y debe prepararse para hacerse cargo del cuidado médico de sus reos. Pero críticos dicen que aún le falta mucho por hacer al CDCR.
SACRAMENTO, California.— El Departamento de Prisiones (CDCR) pidió a un juez federal regresar el cuidado de salud de los presos al control de California en 30 días pero los abogados que demandaron al estado por proveer atención médica por debajo de los estándares constitucionales dijeron que aún no es tiempo.
El cuidado médico de los reos fue entregado a un interventor federal en 2006 luego de una demanda colectiva interpuesta en 1990 por reos que se quejaban por el deplorable cuidado médico. Pero la semana pasada CDCR anunció que tras seis años de trabajar con el interventor federal para reconstruir el sistema de cuidado de salud de las prisiones, California está lista para tomar control.
En un documento entregado a la corte, el estado argumenta tener “la voluntad, capacidad y liderazgo para mantener un sistema sustentable que provea cuidado de salud médico adecuado constitucionalmente”.
Entre ejemplos de mejoría se citan: el rediseño de la atención primaria en las 33 instituciones para adultos; aumento significativo en el número y calidad del personal; establecimiento de procedimientos de control de calidad; mejor uso de la tecnología, incluyendo expedientes médicos electrónicos; y la construcción de 1,722 camas para enfermos en Stockton.
En el documento entregado a la corte, se hace además notar la favorable evaluación que le dio la Oficina del Inspector General al CDCR.
El Departamento de Prisiones pidió al juez Thelton Henderson poner fin a la intervención federal y que durante un año sea reemplazada por una autoridad especial para monitorear el progreso de los trabajos en proceso.
En enero, el juez dijo que el Departamento de Prisiones había hecho un progreso muy importante y que el final de la intervención federal estaba a la vista. Ordenó asimismo comenzar a planear el regreso de la autoridad en el cuidado de salud al CDCR.
Pero Don Specter, director de Prison Law Office, la oficina de abogados con sede en Berkeley que demandó al estado por las condiciones del cuidado médico para los presos, dijo que no está de acuerdo en que la intervención termine en 30 días. “Debe ser un proceso gradual y concluir en 2014”, precisó.
Estableció como razones el hecho de que aún con el progreso hecho a partir de que el interventor federal tomo el cuidado de salud en sus manos, aún no cumple con los estándares constitucionales. “Necesitan contratar más personal de salud, desarrollar más capacidad médica y probar que pueden manejar el servicio de salud”, observó Specter.
Nancy Kincaid, portavoz del interventor federal Clark Kelso, dijo que varias cosas necesitan pasar antes de que termine la intervención federal. Estas incluyen la activación completa de las instalaciones sanitarias de Stockton, el financiamiento completo y avance de las mejoras en la infraestructura e instalaciones de salud dentro de las prisiones, y que CDCR demuestre que está preparado para administrarlos servicios médicas.