Demandará familia de agente del ICE a EEUU
Interponen una reclamación de homicidio culposo contra el gobierno federal.
Dallas (Notimex).- La familia de Jaime Zapata, el agente de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) asesinado en México en febrero de 2011 por un presunto cártel del narcotráfico, presentará una demanda por homicidio culposo contra el gobierno estadunidense.
La cadena de televisión CBS informó este miércoles que la familia de Zapata interpuso una reclamación de homicidio culposo contra el gobierno federal.
La reclamación, a la que se ha sumado Víctor Ávila, el agente compañero de Zapata que sobrevivió al atentado, constituye un paso que antecede a la presentación de la demanda.
La CBS informó haber obtenido archivos de corporaciones de seguridad que muestran que el arma con la que se dio muerte a Zapata provenía de Estados Unidos.
Los sospechosos de haberla contrabandeado a México habían estado bajo vigilancia de las autoridades por meses en Dallas, sin nunca ser arrestados, añadió.
En mayo pasado, un juez federal en Dallas sentenció a siete años de prisión a Otilio Osorio, uno de los cuatro hombres acusados del contrabando de dichas armas.
En el juicio, los fiscales federales sostuvieron que una de las armas adquiridas y transportada por Osorio fue usada en el asesinato del agente Zapata.
El contrabando habría sido uno de los múltiples que fueron monitoreados por los agentes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), bajo la fallida operación “Rápido y Furioso”.
El operativo estaba diseñado para rastrear las redes de contrabando de armas a México, pero para hacerlo se permitió que cientos de rifles y pistolas fueran transportadas ilegalmente a ese país.
La reclamación por homicidio culposo de la familia de Zapata se da a conocer el mismo día en que el presidente Barack Obama invocara la autoridad de “privilegio ejecutivo” para mantener confidenciales documentos sobre “Rápido y Furioso”.
La acción del ejecutivo se dio al mismo tiempo que un comité de la Cámara de Representantes declaró en desacato al procurador general de Justicia, Eric Holder, por su rechazo a entregar más documentos relacionados con la operación.
Zapata, de 34 años y originario de Brownsville, Texas, fue asesinado en febrero de 2011 cuando en compañía de Ávila fue sorprendido por desconocidos armados, al trasladarse en una camioneta sobre la carretera federal 57 en el central estado mexicano de San Luis Potosí.
Durante el atentado que costó la vida a Zapata, Ávila resultó herido de dos balazos en una pierna.