Evitan mostrar sus ‘joyas’
Las fotografías del príncipe siguen sin verse en Inglaterra
LONDRES, Inglaterra. El príncipe está desnudo, pero los diarios británicos no publican las fotos.
Los tabloides del país, amantes de un buen escándalo, dedicaron muchas páginas ayer a la historia de Enrique sin ropa en la suite de un hotel de Las Vegas.
Sin embargo, todos acataron la advertencia de oficiales reales de que publicar las imágenes en cuestión, vistas ya por millones en Internet, sería una violación a su privacidad.
Así que mientras el Evening Herald de Irlanda publicó las fotos del príncipe en cueros en primera página, los diarios ingleses optaron por usar imágenes de Enrique de vacaciones en traje de baño y sombrero de fedora.
El tabloide The Sun tuvo una solución algo más creativa: puso a un empleado llamado Enrique a posar con una interna de 21 años para recrear la famosa escena bajo el titular “Enrique toma las joyas de la corona”.
Bob Satchwell, quien encabeza la Sociedad de Editores, dijo que los periódicos simplemente estaban cumpliendo con el Código de Práctica voluntario, según el cual “es inaceptable fotografiar a individuos en lugares privados sin su consentimiento”.
Pero otros observadores de los medios dijeron que el escándalo que estalló hace un año por espionaje telefónico y otras maldades de los tabloides domesticó a la una vez revoltosa prensa británica.
Los periódicos fueron expuestos a un juicio de opinión pública mientras la investigación de ética en los medios por parte del juez Brian Leveson escuchó testimonios de celebridades, políticos y víctimas de crímenes que dijeron que sus vidas dieron un vuelco negativo gracias a la intrusión de la prensa.
El escándalo acabó con un tabloide, el News of the World, cerrado por su propietario Rupert Murdoch tras revelarse sus prácticas ilegales de espionaje, y manchó la imagen de la prensa británica en general.
Mientras las autoridades consideraban si imponer límites más estrictos a la libertad de prensa, muchos sienten que los tabloides se están absteniendo de publicar chismes y primicias de celebridades que una vez habrían venerado.
Neil Wallis, un exeditor ejecutivo de News of the World, dijo que los efectos del escándalo de espionaje habían dejado a los diarios “temerosos de su propia sombra”.
Mientras diarios que incluyen The Sun y el Daily Mirror proclamaron que las fotos de Enrique desnudo fueron “prohibidas”, esa no es exactamente la verdad.
Varias organizaciones mediáticas alrededor del mundo publicaron las dos fotos del príncipe, que según reportes de la prensa británica están en venta a unas 10,000 libras (16,000 dólares).
Los medios ingleses se abstuvieron tras recibir advertencias el miércoles de oficiales del palacio.
La oficina del príncipe Enrique confirmó que contactó a la Comisión de Quejas de la Prensa, reguladora de la industria, que en respuesta aconsejó a los diarios que no publicaran las imágenes.
Cualquier periódico que lo hizo se arriesga a ser reprendido por la comisión, que puede exigirle la publicación de una disculpa pero no tiene la potestad de imponer multas.
También podrían potencialmente recibir una demanda del príncipe por invasión a su privacidad.
Una carta al grupo de la firma real de abogados Harbottle and Lewis advirtió que oficiales reales “se reservan por completo su derecho a cualquier paso futuro si se publican las fotos”.
En otra época los editores se hubieran arriesgado, argumentando que la publicación de las imágenes era de interés público por ser Enrique una figura pública.
Satchwell reconoció el riesgo de que la investigación de Leveson podría enfriar la libertad de prensa. Pero dijo que los periódicos simplemente se comportaron de manera responsable con Enrique.
“Claro que la libertad de prensa es vitalmente importante”, dijo. “Pero el hecho de que puedes publicar algo no significa que debas hacerlo”.