David Bisbal edita disco de su gira acústica

MADRID, España.— Nació como un paréntesis en su carrera y se ha convertido en el proyecto más gratificante para David Bisbal; se trata de la gira acústica del cantante español, que vivió uno de sus momentos álgidos en uno de los teatros más emblemáticos del mundo, editado ahora con el título Live at the Royal Albert Hall.

Aquella noche del 26 de septiembre en Londres fue especial, de las que marcan la trayectoria de un artista.

“Nunca la olvidaré”, confiesa en una entrevista reciente. “Actuar en esa maravilla de teatro me ayudó en el crecimiento de mi carrera. Además tuve el privilegio de actuar junto a músicos a los que admiro mucho, amigos”.

Malú, Rosario, Luis Fonsi y Pastora Soler fueron los artistas que acompañaron a Bisbal en el Royal Albert Hall de Londres, el tercer español que ofrece un concierto en ese recinto después de Julio Iglesias y su hijo Enrique.

Los temas que entonces interpretó, y que suenan en este disco, son algunos de sus grandes éxitos, como Lloraré la penas o Mi princesa, además de otros ajenos que han marcado la historia musical de las últimas décadas, como Lucía o Adoro.

Bisbal es el primer artista español en distribuir su música a través de la plataforma de venta “online vente-privee”, una iniciativa que ya han probado artistas como Iggy Pop, mítico líder de la banda The Stooges, o Alain Chamfort.

Después de tres semanas en esa plataforma digital, Live at the Royal Albert Hall salió a la venta en formato físico el 13 de diciembre en ocho países de Europa. A Latinoamérica llegará el próximo 14 de febrero y a EEUU en marzo, donde finalizará en ese mismo mes esta exitosa gira.

“Es gratificante ver que la música latina tiene cada vez mayor presencia. En mis conciertos he defendido mi idioma y mis raíces latinas, porque me siento muy arraigado a esa cultura”, explica el almeriense sobre su periplo por el Viejo Continente, donde ha actuado en Rumanía, Bélgica, Suecia, Suiza, Italia y Alemania.

El cantante ha completado alrededor de 109 conciertos de una gira, Una noche en el Teatro Real, que ha permitido descubrir a un Bisbal íntimo, sosegado y “más cercano”.

Un proyecto que, según él, nació con la idea de ser “un paréntesis” en su carrera, y que incluso le generó ciertas “dudas”.

Sin embargo, tras su prolongación y los reconocimientos recibidos, entre ellos un Grammy Latino por el disco del mismo nombre, se ha convertido en un estilo con el que quiere seguir experimentando.

“Es un tipo de música que disfruto mucho más. Tengo la sensación de que cuando regrese al pop podré transmitir cosas nuevas. Sumaré el género que siempre he defendido con uno más clásico”, añade.

El resultado puede ser una “mezcla explosiva”, pero que a su modo de ver le permitirá seguir “creciendo y evolucionando”, que es lo que verdaderamente le importa.

A pesar de seguir rompiendo récords, colgando el cartel de “No hay entradas”, allí donde actúa, y recibiendo galardones, no cree sin embargo que esté al margen de crisis musicales y globales.

“Hay dificultades para todos, yo aposté por hacer algo diferente y quizás ahí haya estado la clave”, explica.

Una afirmación que llega en uno de los momentos de mayor proyección mediática para el artista, gracias a su participación en el concurso de talentos La voz, con el que está redescubriendo su faceta televisiva, y, por qué no, su capacidad para recibir críticas e incluso aprender de ellas.

“Conforme tu carrera crece, te das cuenta de que el público te pide que seas bueno en todo, más allá de la música. Tienes que estar preparado para todo, estar alerta en cualquier campo, pero me gusta esa presión. Si recibo críticas negativas lo hago con inteligencia y las valoro”, ha concluido.