Día de Navidad es de duelo para Newtown
Al poco tiempo de matanza llegan nuevas muestras de apoyo
NEWTOWN, Connecticut (AP). Newtown pasó la Navidad en medio de osos de peluche, flores y velas cubiertas de nieve en el improvisado monumento creado en honor de los 20 niños y seis adultos que murieron baleados recientemente en el segundo tiroteo escolar más mortífero en la historia de Estados Unidos.
El estallido de apoyo a esta comunidad del estado de Connecticut continuó durante la víspera de Navidad, cuando acudieron visitantes que llevaban tarjetas y otras muestras de solidaridad.
“Sabemos que van a sentirse amados. Ellos sienten que a alguien realmente le importa”, dijo Treyvon Smalls, de 15 años de edad, quien acudió portando cientos de tarjetas procedentes de todo el estado.
Policías de otras localidades estaban de turno ayer para poder darles a los agentes locales un descanso de los últimos 11 días de horror y luto luego del suceso sobre el que las autoridades aún no ofrecen una teoría sobre una posible causa.
“Es un gesto amable que ellos pueden aprovechar de esta manera”, dijo Ted Latiak, un detective de la policía de Greenwich, Connecticut, ayer por la mañana mientras que él y un colega salían de una tienda con rosquillas y café para otros oficiales.
En la Iglesia Católica Santa Rosa de Lima, a la que asistían ocho de los niños que fueron víctimas de los disparos, el pastor dijo a los feligreses en la segunda de las cuatro misas del martes que “hoy es el día en que empezamos de nuevo”.
Al recordar los eventos del 14 de diciembre en la escuela primaria Sandy Hook el reverendo Robert Weiss dijo: “En el momento en que el primer rescatista atravesó las puertas sabíamos que el bien siempre vence al mal”. “Conocemos la Navidad de una manera que nunca pensamos que la conoceríamos”, dijo Weiss. “Necesitamos un poco de Navidad, y la hemos recibido”.
En la Iglesia Episcopal de la Trinidad cientos de personas acudieron a los servicios de la víspera de la Navidad. Fueron recibidos por el sonido de un coro infantil.
La misa en general adoptó un tono de celebración. La pastora Kathie Adams-Shepherd encabezó la congregación al orar para “que la alegría y el consuelo del maravilloso consejero pueda animar a todos los que se ven afectados por la enfermedad, el peligro, o la pena, en especial a todas las familias afectadas por el tiroteo ocurrido en Sandy Hook”.