Obama se inclinaría por un proyecto integral
La Casa Blanca está negociando con un grupo de Senadores la presentación de un proyecto de ley de reforma migratoria integral que planteará la legalización de millones de inmigrantes indocumentados, la ampliación de varias categorías de visas para facilitar la inmigración legal y algún tipo de programa de trabajadores temporales más efectivo que los que actualmente existen, entre otras.
Así lo reportó este domingo el periódico New York Times citando fuentes anónimas del senado y la Casa Blanca. El Presidente Obama también dijo en su mensaje radial semanal del sábado que el país debe “emprender con urgencia la difícil misión” de reformar el sistema migratorio. Además, según el portavoz de la Casa Blanca Jay Carney lo dijo hace unos días, el presidente hablará del tema en su próximo discurso del “Estado de la Unión”.
Todo indica que la Casa Blanca quiere ver un proyecto “comprehensivo” o integral y no por pedazos como algunos habían indicado sería más práctico. Entre ellos, el senador Marco Rubio, republicano de Florida, había dicho en entrevistas que sería más fácil atacar el tema en forma progresiva y no un proyecto que toque la reforma en general.
Grupos cabilderos en Washington vieron esto como una buena señal de que pronto habrá una movida concreta sobre el tema, que se había quedado aparentemente rezagado ante otros asuntos que han tomado prioridad en las noticias.
“Creo que lo que pasa es que las conversaciones empezaron luego de la elección y han continuado. Pero debido a lo de Newtown y lo del precipicio fiscal y la prominencia que esto tuvo en las noticias, se interpretó como que inmigración había pasado a un tercer plano”, dijo en una entrevista este domingo Clarissa Martínez de Castro, directora de inmigración y campañas nacionales del Concilio Nacional de la Raza (NCLR).
Martínez agregó que lo delineado por la filtración noticiosa de la Casa Blanca demuestra que “las conversaciones han continuado y que la Casa Blanca está moviéndose en esa dirección, aunque aún no está claro si se limitarán a delinear principios o saldrán con una propuesta directa por medio de algún senador”.
La propuesta de la Casa Blanca también probablemente incluirá algún tipo de reconocimiento de quienes consideran que las leyes de inmigración aún no se aplican con fuerza ni se protegen las fronteras, aunque la administración Obama ha deportado a números records de inmigrantes y el gobierno federal hoy día gasta más en ICE y otras agencias que aplican la ley migratoria que en todas las otras agencias de la ley federal combinadas, como reveló un reciente reporte de MPI.
El enfoque elegido aparentemente es el sistema de verificación de trabajadores o E Verify, que ya se está aplicando en forma voluntaria en la mayor parte del país, aunque del lado republicano hay presión para que se haga mandatorio.
Las más recientes informaciones revelan que el senador de Florida Marco Rubio ahora está formando parte activa de dichas negociaciones en el senado, cuyo objetivo es establecer grupos de trabajo bipartidarios sobre el particular. Según fuentes de la capital del país, en el senado el grupo está integrado por los republicanos John McCain de Arizona, Lindsay Graham de Carolina del Sur y Marco Rubio de Florida.
Otros republicanos que participaron en algunas conversaciones fueron Jeff Flake, de Arizona y Mike Lee, de Utah, pero probablemente dejen el liderazgo a Rubio, dijeron fuentes. Del lado demócrata los senadores son Charles Shummer, de Nueva York; Dick Durbin, de Illinois y Robert Menendez, de New Jersey. En la Cámara también hay conversaciones, pero se espera que la movida primero ocurra en el senado. Se habla de la posibilidad de una audiencia en febrero que permita a legisladores discutir el tema y presentar puntos de vista antes de la presentación de proyectos de ley en marzo.