Vigilan a sospechoso de atentado
Los investigadores tratan de saber los detalles del mortal plan de los ataques
BOSTON, Massachusetts. Dzhokhar Tsarnaev, sospechoso de los atentados en el Maratón de Boston, estaba hospitalizado ayer sábado bajo fuerte vigilancia, mientras los habitantes de la ciudad respiraban aliviados y los investigadores trataban de esclarecer los detalles del mortal plan.
Se informó que Tsarnaev, de 19 años, no estaba en condiciones de ser interrogado ayer sábado por la mañana, después de que lo sacaron, herido y sangrando, de una embarcación cubierta por una lona, en un patio de Watertown. La captura ocurrió al final de una jornada tensa que comenzó cuando su hermano mayor, Tamerlan, murió en un intento desesperado por huir.
No había información inmediata de cuándo Tsarnaev sería acusado ni los cargos que enfrentará.
Los cargos más serios de que disponen los fiscales federales serían el uso de un arma de destrucción masiva para matar personas, que conlleva una posible sentencia a muerte. En Massachusetts no existe la pena capital.
El presidente Barack Obama dijo que hay muchas interrogantes sin contestar sobre el atentado, como si los hermanos Tsarnaev originarios de la etnia chechena del sur de Rusia, que llevaban cerca de un decenio en Estados Unidos y que vivían en la región de Boston habían recibido asistencia de otras personas. El presidente exhortó a la población a no apresurarse a sacar conclusiones sobre los motivos de los sospechosos.
Autoridades federales informaron que un equipo especial de investigadores especializado en sospechosos importantes interrogaría al estudiante universitario de Massachusetts sin ponerlo al corriente de sus derechos, invocando una poco común exención por razones de seguridad pública en casos de peligro inmediato.
La Unión de Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU, por sus siglas en inglés), expresó preocupación por esa posibilidad. Anthony Romero, director ejecutivo de la organización, dijo que la excepción se aplica sólo cuando hay una amenaza a la seguridad pública y la “excepción no es ilimitada”. La llamada regla Miranda garantiza el derecho de los detenidos a no hablar y a tener un abogado.
La Oficina del Defensor de Oficio de Massachusetts informó que ha aceptado representar a Tsarnaev una vez que sea acusado. Miriam Conrad, abogada de oficio de Massachusetts, dijo que Tsarnaev debe tener derecho a un defensor tan pronto como sea posible porque hay “preocupaciones serias sobre el interrogatorio”.
Deval Patrick, gobernador de Massachusetts, dijo ayer sábado por la tarde que Tsarnaev se encontraba en estado grave pero estable y que probablemente no podía comunicarse.
“Yo, y creo que todas las autoridades policiales, esperamos por muchas razones que el sospechoso sobreviva”, expresó Patrick después de una ceremonia previa al comienzo de un juego de beisbol en el estadio Fenway Park para rendir homenaje a las víctimas y sobrevivientes del ataque. “Tenemos un millón de preguntas que hay que responder”.
Hasta ayer sábado, más de 50 víctimas de los atentados permanecían hospitalizadas, tres de ellas en estado crítico.