“Esta marcha no es fiesta, es protesta”: inmigrantes en San José
Jóvenes, niños y adultos marcharon y demandaron una reforma migratoria que vuelva a unir a las familias
SAN JOSÉ.— Miles de inmigrantes marcharon el 1 de mayo para exigir a los legisladores que el plan de reforma migratoria recientemente anunciado sea igual para todos. Organizaciones pro inmigrantes, activistas, sindicatos, grupos religiosos entre otros se unieron en el sur de la bahía para presionar a los legisladores y exigir justicia para los millones de inmigrantes indocumentados que viven en este país.
“Hay que informarnos, conectarnos y principalmente hay que presionar . Estamos listos, hagan lo correcto con nosotros y el país. Saldremos victoriosos si salimos a marchar, esto es solo el comienzo”, expresó el sacerdote Jon Pedigo, párroco de la Iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, de donde partió la marcha.
El plan de reforma migratoria no tiene muy contentos a todos, especialmente a los jóvenes, en su mayoría “dreamers” quienes a pesar de los beneficios que han obtenido con el programa de Acción Diferida no ven sus sueños cristalizados mientras sus padres no sean beneficiados a corto plazo.
“Estoy muy apenada porque mi padre no arreglaría sus documentos tan pronto como imaginé. Mi padre ha demostrado buen carácter moral, ha contribuido con el pago de los impuestos y no es justo que tenga que esperar muchos años para hacerse residente y ciudadano. Él no se lo merece, está muy delicado de salud y no sé si alcanzará”, dijo muy apenada Paty (desea mantener su apellido en reserva), quien gracias al programa de Acción Diferida ha logrado el trabajo de sus sueños al ser contratada como terapeuta.
De otro lado jóvenes como César Juarez considera que los padres merecen mejor consideración. “Mi madre que fue la “soñadora original” no arreglaría documentos sino hasta en 13 años. Fue ella quien me trajo y arriesgó el todo por el todo para darnos la educación y finalmente gracias a eso califiqué para la acción diferida”, dijo César Juarez.
El abogado de inmigración Bernardo Merino explicó que lo positivo de esta reforma es legalizar el estatus de la mayoría de las personas indocumentadas. “Tanto los “dreamers” como los trabajadores agrícolas tendrán un camino especial mientras que los demás tienen que esperar un largo periodo de 13 años que significará gasto de unos tres mil a cuatro mil dólares aproximadamente”.
Michael Robles (19) otro joven beneficiado por el programa de “Acción Diferida” dijo que el seguirá marchando hasta que se cumpla con una reforma uniforme para todos. Robles comentó que conoce muchos amigos que aún no han aplicado para su permiso de trabajo y esto se debe a la falta de dinero..
Lucila otra “dreamer” expresó que seguirá luchando por una justa reforma y que dentro de sus sueños está considerado el estudiar, trabajar y comprar a sus padres la casa que nunca han tenido.
La marcha partió de la Iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, del este de San José un poco después de las 4 de la tarde. Todos los participantes caminaron por dos horas y llegaron al municipio de esta ciudad para aplaudir esta meta alcanzada.
Según la policía de San José alrededor de 10 mil personas salieron a marchar. Sin embargo según los organizadores de la Coalición 1ero de Mayo salieron a las calles por lo menos 15 mil personas que se fueron incorporando a lo largo del recorrido de esta marcha.