No permitirán armas

JERUSALÉN, Israel.— El primer ministro israelí insistió ayer en que no permitirá que “armas peligrosas” lleguen a los milicianos de Jezbolá en Líbano, luego de conocerse versiones informativas de que Israel realizó recientemente un ataque aéreo en el norte de Siria contra un cargamento de misiles avanzados.

El ataque aéreo en Latakia supuestamente tuvo como blanco misiles rusos antibuque Yakhont, una de las armas avanzadas que los funcionarios israelíes habían dicho con anterioridad que no permitirían que llegaran a Siria. El ataque sería el cuarto conocido contra Siria este año.

Cuando se le preguntó acerca de los informes en el programa de CBS-TV “Face the Nation”, el primer ministro Benjamin Netanyahu se negó a confirmar o negar la participación israelí en el último ataque aéreo.

“Mi política es evitar la transferencia de armas peligrosas a Jezbolá en Líbano y otros grupos terroristas. Y respaldamos esa política”, dijo, de acuerdo con una transcripción de la entrevista proporcionada por CBS.

Israel ha seguido de cerca el conflicto sirio desde que estalló en marzo de 2011. Si bien ha tenido cuidado de no tomar partido en la guerra civil, ha dicho en repetidas ocasiones que tomaría medidas para evitar que Jezbolá y otros grupos hostiles reciban lo que llama armas que “cambian el juego”, incluidas las armas químicas y los misiles guiados avanzados. El presidente sirio Bashar al Assad es un patrocinador clave de Jezbolá.

Los misiles Yakhont son poderosas armas antibuque lanzadas desde la costa de las que es difícil defenderse. Viajan a dos veces la velocidad del sonido cerca de la superficie del agua, por lo que es difícil que un radar los detecte. Israel los considera una amenaza a sus instalaciones militares y comerciales a lo largo de la costa, incluyendo sus reservas marítimas de gas natural.