EEUU atacaría sin ayuda
Luego del rechazo británico, Obama estudia acción militar en Siria
WASHINGTON, D. C. El presidente Barack Obama se preparaba ayer para la posibilidad de lanzar un ataque estadounidense unilateral contra Siria en cuestión de días luego de que Gran Bretaña descartó hacerlo en una sorprendente votación en el Parlamento.
Enfrentado también ante una ola de escepticismo interno sobre el tema, el Gobierno dio a conocer información de inteligencia a un grupo de legisladores con la intención de convencerlos de que las autoridades sirias utilizaron armas químicas contra su propio pueblo y deben ser castigadas.
A pesar de los obstáculos para formar una coalición internacional, Barack Obama parecía mantenerse firme en su decisión y sus asesores dijeron que podría estar dispuesto a actuar contra Siria por su cuenta.
“El presidente de Estados Unidos es elegido con el deber de proteger los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos de América”, dijo Josh Earnest, portavoz de la Casa Blanca.
Incluso antes de la votación en Londres, Estados Unidos se preparaba para actuar sin la autorización formal de las Naciones Unidas, donde Rusia ha bloqueado los esfuerzos por buscar una resolución que autorice el uso de la fuerza, y sin la del Capitolio. Pero Washington esperaba que Gran Bretaña, uno de sus principales aliados, se uniera al esfuerzo.
Altos funcionarios estadounidenses hablaron con ciertos legisladores durante más de 90 minutos en una teleconferencia el jueves por la noche para explicar por qué creen que el Gobierno de Bashar al Assad es el culpable de un presunto ataque con armas químicas la semana pasada.
Los legisladores de ambos partidos han estado presionando a Obama para que proporcione una razón legal que garantice una acción militar y que especifique cuáles serían los blancos. También le piden evidencias firmes que vinculen a Assad con el ataque.
Bob Corker, senador republicano por Tennessee y el miembro de mayor jerarquía de su partido en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, dijo después de la reunión con la prensa que la “fuerte evidencia del uso continuo de armas químicas por parte del régimen de Assad amerita una respuesta militar”. Corker respalda avanzar contra Siria en forma limitada.
Aún está por verse si los escépticos quedaron convencidos, dada la expectativa de que las autoridades retendrán información secreta con el fin de proteger a sus fuentes y métodos de inteligencia.
En Londres, el primer ministro David Cameron argumentó que un ataque militar sería legal bajo bases de ayuda humanitaria. Pero enfrentó profunda presión de los legisladores, y ya había prometido que no ordenaría una acción militar hasta que un equipo de expertos de la ONU en armas químicas que se encuentra en Siria dé a conocer sus hallazgos sobre el ataque del 21 de agosto.
En breves comentarios después de la votación, el primer ministro dijo que, aunque él cree en una “respuesta dura” al uso de armas químicas, respetará la voluntad de la Cámara de los Comunes.
Caitlin Hayden, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Obama, dijo que dicho Consejo seguirá efectuando consultas con Gran Bretaña en torno al tema, pero que Obama tomará decisiones basándose en los “mejores intereses de Estados Unidos”.
Aún no es seguro que Washington tenga que actuar solo. Francia anunció que sus Fuerzas Armadas “han sido colocadas en posición de responder” si el presidente Francois Hollande compromete fuerzas a una intervención en Siria. Hollande no necesita la aprobación del Parlamento francés para lanzar una acción militar que dure menos de cuatro meses.
Obama conversó sobre la situación en Siria con el republicano John Boehner, presidente de la Cámara de Representantes, que le escribió al mandatario anteriormente esta semana solicitándole una justificación legal para un ataque militar y los blancos de cualquier posible acción.
Assad, quien ha rechazado haber usado armas químicas, afirmó que su país “se defenderá a sí mismo de cualquier agresión”.
Los funcionarios hablaron a condición de guardar el anonimato porque no están autorizados a declarar en público sobre los datos de inteligencia.
Obama continuó defendiendo sus argumentos ante líderes mundiales en pro de una respuesta robusta, y el jueves habló con la canciller alemana Angela Merkel. Alemania efectuará elecciones el próximo mes, por lo que es improbable que la canciller meta a su país a un conflicto militar.
Merkel también habló ayer sobre Siria por vía telefónica con el presidente ruso Vladimir Putin, insistiéndole que el ataque con armas químicas “requiere una reacción internacional”, dijo Steffen Seibert, portavoz de la líder alemana.