Un nuevo ataque a Obamacare
Retirarían fondos a la reforma de salud a cambio de que el Gobierno pueda operar
WASHINGTON (AP). La Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, votó ayer a favor de una iniciativa que busca retirarle el financiamiento al plan de salud del presidente Barack Obama conocido como Obamacare en una arriesgada maniobra que podría amenazar con paralizar al gobierno en semana y media.
Las diferencias se enfocan en una financiación de emergencia que permitirá el funcionamiento normal del gobierno luego del primero de octubre, cuando inicia el año fiscal.
En general, dichas medidas gozan de un amplio respaldo bipartidista, pero los activistas del movimiento conservador Tea Party obligaron a los dirigentes republicanos a agregar una previsión que busca eliminar la financiación de la ley de cuidados médicos de Obama.
La votación de 230-189 preparó el escenario para un enfrentamiento con el Senado, controlado por los demócratas, que ha advertido que la próxima semana retirará del proyecto de ley esta disposición que busca retirarle fondos al nuevo plan médico. El senado también busca conminar a la Cámara Baja para que apruebe un proyecto de ley de financiación más simple y directo que pueda promulgar Obama.
El líder del Senado, el demócrata Harry Reid, dijo que el proyecto de ley no irá a parte alguna y tildó la posición de la Cámara de “una pérdida de tiempo.” La Casa Blanca prometió que Obama vetará la medida en el improbable caso de llegar a su escritorio.
El proyecto de ley de financiación temporal es necesario por el permanente atascamiento presupuestario que ha descarrillado las partidas anuales de gastos necesarias para financiar las operaciones de los organismos federales.
La polémica sobre las partidas de gastos más importantes tiene lugar mientras Washington se prepara para una batalla incluso más importante sobre el límite de endeudamiento del gobierno federal, a fin de que el gobierno pueda pagar sus deudas.
Los demócratas advirtieron que no serán hechos rehenes ni permitirán aprobar las medidas de endeudamiento como contrapeso para lograr las victorias legislativas. Los republicanos respondieron que la norma era requerida para evitar un cierre gubernamental que retrasaría la paga de los empleados federales, enviaría a sus casas a funcionarios no esenciales y cerraría parques y oficinas de pasaportes.