Los beneficios de la avena
El consumo de este cereal, uno de los más completos, combate la anemia, ayuda a perder peso y mejora la digestión, entre otras cosas.
Una infusión de avena en ayunas para bajar el colesterol, una taza del cereal mezclado con leche y un toque de canela para dar energía y acabar con la anemia, mezclada con otros cereales y frutos secos en el desayuno para favorecer el trabajo intestinal y acabar con la pesadez estomacal, la avena no sólo es versátil y deliciosa, sino un poderoso aliado para cuidar su salud.
Es baja en calorías: dos cucharadas poseen sólo 100 calorías. También es rica en aminoácidos, grasas saludables, vitaminas, minerales, oligoelementos y fibra. La avena es consumida desde la antigüedad y es considerada uno de los cereales más completos y saludables que existen. No en vano es considerada un súper alimento con múltiples propiedades benéficas.
Los aminoácidos de la avena estimulan la producción de lecitina por el hígado, lo que a su vez favorece a la depuración total de su organismo. Consumir avena ayuda a limpiar las paredes de las arterias, pues la fibra arrastra los depósitos de grasa que se forman en ellas.
Si usted padece diabetes, la avena es un alimento vital en su dieta. La fibra soluble de su composición ayuda a la digestión del almidón y a mantener estables los niveles de glicemia, en especial, después de las comidas.
La fibra insoluble de la avena contribuye a la reducción de los ácidos biliares, facilita el tránsito intestinal y evita el estreñimiento. Asimismo, es rica en carbohidratos de absorción lenta que ayudan a mantener la sensación de saciedad por más tiempo, lo que la convierte en una compañera indispensable si el objetivo es perder algunos kilos extra.
La avena posee 8 aminoácidos esenciales, que la convierten en una importante fuente de proteínas de alto valor biológico. Combinada con leche, su valor se equipara al de otras proteínas como la carne o el pescado, cualidad que es de gran ayuda en la formación de tejidos nuevos en el organismo.
Varias investigaciones realizadas en Estados Unidos han determinado que los fitoquímicos presentes en el salvado de avena son armas de protección contra el cáncer. Consumir avena a diario reduce en 10% la posibilidad de padecer cáncer de colon y de mama.
La avena es rica en omega 6 y ácido linoléico, las llamadas grasas buenas, que favorecen la reducción del colesterol malo o LDL y la actividad del corazón y el cerebro.