Reina caos en llegada del Tri
Directivos de la FMF dejan solos a los seleccionados en el aeropuerto
MÉXICO, D.F. En medio de tumultos, empujones y un desorden que enfadó a decenas de usuarios del Aeropuerto de la Ciudad de México (AICM), ayer por la tarde arribó la selección nacional.
El avión partió de suelo neozelandés a las 03:30 del día miércoles (hora de de Los Ángeles).
Fueron más de 20 horas de vuelo, un par de escalas y horas de insomnio, pero de acuerdo con Oribe Peralta todo valió la pena.
El nuevo ídolo del Tricolor salió con ganas de que nadie lo detuviera, quería irse rápidamente al Centro de Alto Rendimiento, donde está concentrado el Santos Laguna, que el domingo enfrentar a los Gallos Blancos de Querétaro.
Decenas de cámaras y micrófonos le cerraron el paso, los aficionados se dieron vuelo tomándole fotos con el celular, no quería hablar, advirtió que no daría comentarios, pero ante la insistencia, solo manifestó su alegría por haber logrado el objetivo.
“Ahora hay que darle vuelta porque tenemos otros compromisos”, señaló.
Aprovechó que Miguel Herrera salió y se desmarcó, repartiendo un par de autógrafos mientras caminaba a la salida de la Terminal 2.
El resto de sus compañeros también se abrían pasó cuidando el equipaje de mano.
Ahora la seguridad se vio rebasada, el desorden y el caos reinó, y cada uno de los integrantes del Tricolor tuvo que buscar el modo de salir bien librado, pues la Federación Mexicana de Futbol, atenta en otras ocasiones a brindarles una salida más cómoda, ayer los olvidó.