Hay que devolver los fondos
Los estados de la Unión Americana han recibido cientos de millones de dolares que debían de haber sido usados para ayudar en la estabilización de las comunidades más perjudicadas por la crisis hipotecaria. California recibió 369 millones de dólares, pero ninguno de ellos fue a parar al destino previsto.
El gobernador Jerry Brown en su momento decidió usar esos fondos para solventar los gastos del fondo general que enfrentaba un déficit gigantesco. Hoy la situación ha cambiado drásticamente y en el horizonte se proyectan superávit, por lo cual es el momento adecuado para reponer ese dinero. Sin embargo, el presupuesto de Brown ignora olímpicamente esta oportunidad, obligando a que una coalición de organizaciones que representan afroamericanos, asiáticos y latinos lo demanden judicialmente para reponer ese dinero.
Los procuradores estatales, entre ellos la de California, Kamala Harris, de destacada labor al respecto, lograron un acuerdo extrajudicial con una serie de bancos por valor de 25,000 millones de dólares para saldar sus responsabilidad en los préstamos depredatorios que llevaron a la crisis. El acuerdo en el caso de California decía que el 90% de los fondos debía ir a asesoramiento sobre viviendas, ayuda legal, investigaciones para protección financiera y programas similares que ayuden a mitigar el daño causado por los embargos de propiedades.
Los latinos californianos están entre los más perjudicados por la crisis hipotecaria, no obstante California está entre la minoría de los estados que no asignaron ese dinero para los motivos por el cual fue distribuido.
Es lamentable que haya que ir ante los tribunales para obtener los fondos que, de ser usados adecuadamente, ayudarán a evitar la repetición de una crisis similar a la pasada.