El trío que espera a Jeter del ‘otro lado’
Compañeros del 'Capitán Yankee' lo acompañaron en su último juego inaugural en casa
Nueva York.- Derek Jeter no necesita decir palabra alguna en el vestidor de los Yankees porque basta verle salir a jugar y entregarse todos los días sobre el terreno de juego para entender su clase y su liderazgo como pelotero.
“Derek dice algo cuando tiene algo que decir, pero en realidad es de pocas palabras”, comentó Mariano Rivera. “Sin embargo, él decía mucho todos los días sobre el terreno de juego.
Al igual que ‘Mo’, sus otros dos grandes compañeros en la cosecha de cinco anillos de campeonato, Jorge Posada y Andy Pettitte, destacaron las virtudes del capitán de los Bombarderos de El Bronx que la tarde del lunes jugó su último partido inaugural en la casa que ayudó a construir, el Yankee Stadium.
“Derek me hizo un mejor jugador”, aseguró Posada. “Él es un tipo duro y muy inteligente. Piensa en cosas que tú no piensas. Su liderazgo y su amistad son lo principal para mí”.
Estos tres mosqueteros se reunieron con Jeter, el d’Artagnan que aún está en el activo, para festejar el inicio del fin de su última campaña como profesional.
Los cuatro salieron antes del inicio del partido para realizar un doble lanzamiento inicial conjunto: Rivera y Pettitte desde el montículo y Posada y Jeter detrás del plato.
“Le pregunté a Derek qué lanzamiento quería atrapar y le dije ‘Mo’ tiene sinkers y cutters. Y Derek dijo, ‘prefiero atrapar el lanzamiento de Andy” y comenzó a reírse”, detalló Posada.
El ‘Señor Noviembre’, que cumplirá 40 años en junio, es el último jugador que queda de aquella plantilla que ganó los últimos cinco campeonatos de los Yankees y para muchos es un símbolo del equipo y del mismo juego de pelota.
“Cuando Jeter se retire, quedarán como ejemplo su hambre de ganar y de competir, pero sobre todo el ejemplo más grande será que él siempre ha jugado a la pelota de la manera correcta”, aseveró Pettitte.
Esperándolo en el retiro, el exlanzador tejano esperó que Jeter disfrute este último año y le aconsejó que se tome las cosas con calma.
“Le dije que lo disfrute porque pasa tan rápido y en un parpadeo llegará el día en que ya no se pondrá el uniforme y no volverá a pisar el campo como jugador”, dijo.