La ruta de los 5 mil
Operan red de tráfico humano de Guatemala hasta Los Ángeles
De Guatemala a Los Ángeles son 5 mil kilómetros de distancia por la vía terrestre que bordea el Golfo de México hacia Houston, Texas, que es el punto intermedio del trayecto que actualmente están recorriendo los migrantes centroamericanos.
Es la ruta que utiliza una banda muy bien organizada de traficantes de personas que durante los últimos años ha establecido sus operaciones en la frontera de Reynosa, Tamaulipas, con McAllen, Texas.
Es el camino labrado por “coyotes” en colusión con autoridades corruptas y miembros del crimen organizado como “Los Zetas”. Un viaje que a los indocumentados les cuesta al menos 5 mil dólares. Y a veces hasta la vida.
Datos de la Patrulla Fronteriza indican que esa frontera aumentó su actividad por el número de detenciones que creció en un 80% durante el año 2013, mientras que en el resto de los puntos fronterizos de Estados Unidos se redujo.
Un reciente estudio de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA) destaca también que la ruta que están siguiendo los indocumentados cambió del desierto de Arizona hacia el Valle de Río Grande, en Texas, en la frontera con McAllen.
Los relatos de sobrevivientes y familiares de víctimas que fallecieron en el accidente automovilístico ocurrido el 30 de marzo dan cuenta de la operación de esta banda de “coyotes” de múltiples cabezas.
Ese día una camioneta trasladaba a ocho indocumentados de Houston a Los Ángeles, pero al transitar por la Autopista 40, que cruza el desierto de Mojave, se volcóy varios de los pasajeros salieron disparados del vehículo. Cuatro murieron y tres más fueron hospitalizados, uno de ellos aún en estado de coma.
Los testimonios revelan que se trata de una cadena de diferentes “coyotes”, quienes vía telefónica dan órdenes e indicaciones de depósitos o transferencias de dinero. Y también lanzan amenazas.
“Si no nos da 800 dólares más, vamos a mandar a su familiar a otra parte”, fue lo que le dijeron a la tía de una de las víctimas mortales del accidente de Mojave.
Johana Escobar, una de las sobrevivientes, contó que al día siguiente del accidente le llamó una mujer desde Houston para advertirle que no dijera nada porque sabían de su paradero.
Durante el trayecto los indocumentados pasan días en “casas de seguridad” mientras se despeja el camino para avanzar por los diversas carreteras de México hacia el norte.
El cónsul de Guatemala en Los Ángeles, Pablo César García Sáenz, confirmó que el trabajo consular en McAllen, Texas, se ha incrementado debido a un mayor cruce de indocumentados por ese sector.
“Sabemos que tienen el derecho de migrar, pero queremos alertalos de que pueden perder la vida, porque para los ‘coyotes’ ellos sólo son mercancía con signo de dólares”, dijo García Sáenz.
Se trata de una red muy bien organizada de contrabandistas, consideró el cónsul, ya que hacen lo posible para que el migrante no pueda identificarlos.
El 80% de los migrantes que cruzan por McAllen son centroamericanos, precisan datos de los consulados en ese sector.
El informe de WOLA establece también que el número de migrantes que mueren al cruzar por esa frontera también ha aumentado, muchos de ellos víctimas del grupo criminal de “Los Zetas”, como lo fueron los 72 migrantes ejecutados en 2010 en un rancho de San Fernando, Tamaulipas.
Aunque la cifra de migrantes muertos, de acuerdo con las estadísticas de la Patrulla Fronteriza, es mayor en el sector de Tucson, con 195 cadáveres encontrados en el 2013, la frontera de McAllen a Brownsville ha ido en acelerado aumento hasta sumar las 156 muertes.