Miedo a hacer lo correcto
La pelota política sobre inmigración sigue rebotando entre una Casa Blanca temerosa de actuar y un liderazgo de la Cámara de Representantes abiertamente hostil a la idea de una reforma migratoria. No obstante las palabras que se escuchan reflejan algo distinto.
El presidente Obama pospuso hasta agosto la revisión de los procesos de deportación que ordenó hace unos meses, argumentando que quiere dar espacio al Congreso para que vote la reforma. La Cámara Baja, según su presidente, John Boehner, no puede pasar una ley de inmigración porque la mayoría republicana desconfía de que Obama cumpla las leyes de inmigración.
¡Vaya farsa política!
El mandatario hace unos meses fustigó en privado a los activistas pro de la reforma por haberlo criticada justamente porque su administración tiene el record de deportaciones y anuncioa allí que ordenaba la revisión que precisamente ahora pospuso. Esto no ayuda al mandatario. El retraso o cambio de acciones anuncidas dañana aun más la credibilidad que, por los motivos que fuere, llegó al gobierno prometiendo una reforma migratoria, para luego batir todos los records de deportaciones.
Mientras tanto en el Congreso, el liderazgo permite que el recalcitrante congresista Steve King sea la voz cantante en inmigración. La semana pasada se impidió que el pleno vote una enmienda en el presupuesto de Defensa para permitir la regularización migratoria de los “dreamers” a través del servicio militar.
Sin embargo, se permitió ayer una enmienda de King para financiar una investigación por parte del Departamento de Justicia sobre el proceso de deportación diferida porque deja libres a “decenas de miles de criminales”, según el congresista.
Todos tiene miedo a hacer lo correcto por las potenciales repercusiones políticas, a pesar del amplísimo respaldo nacional y sectorial que hay para una reforma integral de inmigración. Hoy temen más a la reacción de los ultra-conservadores que, por ejemplo, a la de los latinos. Estos son cálculos por el cual un día los votantes pasarán su cuenta.