Rompecabezas regional

La meta final declarada por la la administración Obama es “destruir” al Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS); para lograrlo requerirá tiempo y paciencia para obtener ese propósito.

Uno de los pilares de la estrategia es reforzar la credibilidad del gobierno iraquí para evitar la atracción de ISIS entre la población sunni. El nuevo gobierno tan promovido por la Casa Blanca todavía mantiene la divisiva presencia de Nouri al-Maliki como uno de tres vicepresidentes y hasta el momento el nuevo gabinete tiene menos presencia sunni que el anterior.

El hecho que todavía no se hayan definido los cargos de ministro de Defensa e Interior —que solían ser sunnis— da la impresión de que el actual gobierno iraquí fue armado a las apuradas para lucir presentable en el mensaje de Obama de la semana pasada.

El reciente asesinato del trabajador inglés a manos de ISIS refuerza el otro aspecto de la estrategia que es incorporar a los aliados europeos en esta lucha para que colaboren desde la parte militar a la humanitaria. La intolerancia combinada con extrema crueldad del grupo extremista es el mejor argumento para respaldar la acción estadounidense.

El problema es que ese respaldo se nubla a medida que uno se acerca a la región. Por ejemplo, Turquía que comparte frontera con Siria está más interesada en el petróleo surgido del territorio bajo control de ISIS que en combatirlo. Varias naciones árabes dicen respaldar la estrategia de Obama y hasta contribuir con bombardeos como ocurrió. Pero temen reforzar el gobierno de Assad en Siria y se oponen al avance shiita de sus aliados en la región. Estas mismas naciones en algún momento apoyaron con fondos a ISIS.

En Siria la estrategia respalda a los rebeldes moderados para que pelen a ISIS y al gobierno sirio. El problema es que las facciones no son tan “moderadas” lo que hace mas impredecible la guerra en Siria.

Finalmente ISIS tiene decenas de miles de combatientes pagos y fanáticos, un arsenal estadounidense, tiene territorio tomado y respaldo de parte de la población.

Este es un conflicto más complejo que Afganistán y las propia guerras de Irak. La estrategia de Obama inevitablemente que a la deriva de los eventos inesperados no por falta de precaución por la naturaleza de este rompecabezas regional

En esta nota

Afganistán Irak ISIS Obama
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain