¿Sabes cómo Sofía Vergara disfruta el cuerpo de su prometido?

¿Qué se necesita para enamorar a Sofía Vergara? Tener un gran sentido del humor, saber bailar, tener un cuerpo esculpido en el gimnasio y una autoestima a prueba de desnudos.

En resumen, ser Joe Manganiello.

Y es que el actor no se anda con falsas modestias y, al igual que Big Dick Richie (BDR), su personaje en “Magic Mike XXL”, presume con generosidad sus talentos y atributos.

Así, en los primeros minutos de la película, que se estrena hoy, BDR llena la pantalla con su amplia sonrisa… y un trasero en todo su esplendor.

“Nunca me he sentido inseguro de mi cuerpo, porque por eso pasas tantos meses en el gimnasio, para eso te preparas, así, cuando llega el momento de quitarse la ropa, no lo piensas tanto. Además, todas tus inseguridades personales o como actor quedan relegadas cuando entras en tu personaje”, asegura el actor en tono serio, pero sin ser presuntuoso.

Quizá esa confianza en sí mismo lo llevó a proponerle matrimonio a la actriz colombiana cuando llevaban apenas seis meses de noviazgo.

Y aunque se muestra reacio a dar detalles de la boda, que se presume tendrá lugar el próximo otoño, admite que su prometida se ha beneficiado de todo lo que él ha aprendido del negocio del chippendale.

“Claro que sí [le hago rutinas de baile], todo el tiempo, donde quiera que haya espacio. Es parte de la diversión que brinda este trabajo, te anima a probar cosas y espero que también anime a otros hombres. Si no te sientes cómodo con tu desempeño en casa, siempre hay modo de mejorar”, sostiene con una sonrisa retorcida, sexy y retadora, como la de su personaje.

Pero no sólo Sofía se siente feliz con el talento que Manganiello ha demostrado en lo que respecta a quitarse la ropa al ritmo de cualquier canción (en serio, hasta con una de los Backstreet Boys).

“Mi madre se mandó hacer una playera que dice: ‘Soy la mamá de Big Dick Richie’, y se la pone cuando va a Starbucks. Está muy orgullosa de mí”, dijo.

Y cómo no iba a estarlo, si su hijo literalmente arriesga el físico cuando está frente a las cámaras. Prueba de ello es la lesión que se provocó al filmar su gran escena final en Magic Mike XXL, la cual hace un guiño a Cincuenta Sombras de Grey.

“Sufrí un desgarramiento del bíceps del brazo derecho, que requirió cirugía. Por fortuna no se desgarró desde el hombro, porque el brazo se habría hinchado y puesto todo negro, y obviamente no hubiera podido continuar con la película. Todavía trabajé cuatro semanas y luego me operaron”, contó.

Todo sea por amor al arte… del striptease masculino.